Exigen el cumplimiento del compromiso del Ayuntamiento de la ciudad de municipalizar los centros Nova Fortuny, Gua-Gua, Estel Blau, Garabatos y Patufet

La plataforma de familias afectadas por el retraso de la municipalización de 5 escuelas infantiles de l’Hospitalet, Nova Fortuny, Gua-Gua, Estel Blau, Garabatos y Patufet reclaman que se haga efectivo el compromiso adquirido por el Ayuntamiento de la ciudad para el próximo curso 2024-2025. Tras pedir soluciones al concejal David Quirós, las familias asistirán al pleno municipal convocado este viernes, 22 de marzo a las 10,30 horas para hacerse escuchar.

La comunidad educativa de las 5 escuelas infantiles también reclama una compensación económica por el atraso de la municipalización y que alcanza a este curso escolar en que no se ha cumplido el compromiso del Ayuntamiento de l’Hospitalet, así como la equiparación de precios con el resto de escuelas infantiles públicas.

En un manifiesto, las familias afectadas recuerdan que el Pacto Local por la Educación de 2016 ya recogía el compromiso de impulsar el proceso de municipalización de las cinco escuelas infantiles de L’Hospitalet de Llobregat que ahora se movilizan: Nova Fortuny, Gua-Gua, Patufet, Estel Blau y Garabatos. Hasta el 2020 recuerdan que no se intensificó este proceso y se anunció una primera fecha de integración en la red municipal de cara al curso 2023/24. A principios de 2023 se comunicó el atraso en el curso 2024/25 y un año más tarde se ha vuelto a comunicar el aplazamiento para el curso 2025/26.

La comunidad educativa denuncia que estos atrasos han generado mucha decepción y frustración en las familias de las cinco escuelas infantiles afectadas que, año tras año, “quedamos a la espera de que el Ayuntamiento complete el proceso de municipalización que ya tendría que estar finalizado”. Los representantes de las familias de las escuelas infantiles afectadas consideran que “es una vergüenza y un perjuicio para muchas familias que este acuerdo no sea un tema prioritario en sus agendas y presupuestos, ninguneando la situación de la ciudadanía afectada por este atraso continuo, teniendo que hacer frente de manera privada a los costes que comporta la carencia de una escolaridad pública para nuestros infantes”.

Unos costes para las familias que ascienden por una criatura de I0 e I1 de hasta 1.500 euros anuales más en las cinco escuelas por el hecho de no haberse acabado la municipalización. Este importe supera los 3.000€ en el caso de I2, “esto sin contar también las diferencias de precio de comedor o del servicio de acogida. Desgraciadamente -añade el manifiesto-, muchas familias tendrán que renunciar a llevar sus hijos e hijas a nuestras escuelas por no poder hacer frente al costes, con todas las consecuencias que esto comporta para la atención educativa de los infantes, la conciliación laboral y familiar y la sostenibilidad de las escuelas infantiles afectadas”.

Incapacidad histórica del Ayuntamiento

También es patente la existencia de una larga cola de espera para entrar en las escuelas públicas de L’Hospitalet de Llobregat y reconocen que “a pesar de que estamos muy satisfechos con nuestras escuelas, si no podemos disfrutar los precios municipales y la gratuidad a I2, es por la incapacidad histórica del Ayuntamiento a ofrecer las plazas que se necesitan”.

Las familias denuncian que la etapa de 0 a 3 años no puede ser la gran olvidada de la Administración pública. “No podemos permitirnos la invisibilización y pérdida del valor pedagógico y de acompañamiento a criaturas y familias que realizan las escuelas infantiles. Las escuelas -añaden en el manifiesto- son el espacio educativo donde se establecen las primeras bases para el desarrollo integral de los niños, es el contexto que facilita un conjunto de experiencias educativas que promueven el crecimiento y el aprendizaje y es uno de los lugar donde las familias nos sentimos acompañadas y orientadas en la crianza”. La escolaridad de los niños y el futuro de estas escuelas infantiles “no puede continuar colgando de un hilo que cada vez tensa más por.la carencia de voluntad política y de una mala gestión y previsión del proyecto de municipalización”, concluyen.