Los propietarios buscan alternativas también con el alquiler de habitaciones para esquivar los límites al precio de los alquileres de la nueva ley de vivienda

L’HOSPITALET. J.C.VALERO.- El crecimiento de los pisos turísticos y el alquiler de habitaciones es espectacular en el último año en l’Hospitalet. No solo en las plataformas Airbnb y Vrbo. Los alojamientos turísticos se extienden por los barrios de la segunda ciudad catalana y dejan de ser un fenómeno exclusivo de Barcelona ciudad y de las zonas emblemáticas de la capital para ganar representatividad en el área metropolitana. Y l’Hospitalet se lleva la palma. Solo hace falta echar un vistazo a los principales portales de reservas para encontrarse propuestas como: “Moderno piso con ubicación ideal, a 5 minutos del Camp Nou”, dice la descripción de un apartamento situado en Collblanc-La Torrassa. 

En el mes de febrero, que es de temporada turística baja, solo en l’Hospitalet se pudo contabilizar 630 ofertas de pisos activos que se ofrecen en esta modalidad porque los turistas buscan hospedarse en barrios más baratos que los céntricos, pero que estén bien comunicados. Pero tras un simple rastreo se encuentran por decenas anuncios también de alquiler de habitaciones, otro fenómeno que ha crecido exponencialmente como consecuencia de las limitaciones legales a los alquileres de viviendas. Un anuncio dice: “Relájate y desconecta en este alojamiento tranquilo y elegante muy bien comunicado para llegar al centro de Barcelona en menos de 15 minutos”. La promoción cita que se encuentra en l’Hospitalet al precio de 129 euros la noche, a pesar de haber hecho la consulta en un día laborable de finales de febrero. 

Esta es una realidad que empieza a asumir el mercado del alquiler, que sigue batiendo récords de precios a ritmo mensual, tras la entrada en vigor de la Ley de Vivienda, que ha provocado la huida en menos de un año de innumerables propietarios a otras modalidades de arrendamiento en las que no existen intervenciones, como el alquiler de temporada (menos de un año, pero que suelen hacerse por semanas e incluso días), con la plaza Europa y el barrio de Santa Eulalia como principales focos, pero también Bellvitge y Gornal que experimentan un boom de alquiler de habitaciones y también pisos turísticos.

La ley de Vivienda y la falta de un marco regulatorio estable está haciendo que los caseros busquen alternativas. La limitación de precios afecta solo a zonas tensionadas, pero el ruido de fondo hace que el propietario se sienta cada vez más expuesto, comentan expertos inmobiliarios como Ferran Font, director de estudios de pisos.com. El experto también señala que la oferta de vivienda turística es mucho más flexible que los hoteles, ya que los propietarios pueden optar por desconectar su propiedad durante un mes, para su uso personal o alquileres a más largo plazo, y luego volver cuando sea más rentable, por ejemplo, en temporada alta.

Muerte por éxito

Los pisos turísticos pueden matar de éxito el turismo en nuestro país. Amancio López, presidente del Grupo Hotusa que dispone de un establecimiento en l’Hospitalet, advierte de “la gran amenaza” de los pisos turísticos, un modelo que, a su juicio, “genera un impacto muy negativo en el turismo urbano”. Este
empresario augura un futuro “muy favorable” para el sector turístico, pero advierte que se puede producir “una muerte por éxito” debido al alquiler turístico y a cómo las autoridades lo han permitido sin intervenir.

El presidente de Grupo Hotusa defiende que “es el momento de elegir si queremos hoteles de alta gama, de marcas nacionales e internacionales de prestigio que aportan un cliente de alto poder adquisitivo que gasta dinero en el hotel, en los restaurantes, en las tiendas, en las joyerías y que no genera problemas de convivencia; o un turismo en viviendas, en pisos, que genera problemas de convivencia con los vecinos, poco empleo, poca riqueza y que expulsan a la población”. Y se muestra taxativo al afirmar que “los dos modelos no son posibles, porque siempre hay uno que prevalece sobre el otro”.

Más de un millón de pernoctaciones

L’Hospitalet dispone en la actualidad de 30 alojamientos turísticos (hoteles, hostales y apartamentos turísticos) y 5.024 plazas con una ocupación media en 2023 de un 75%, cifras que superan por primer año los datos prepandemia (74,6% de media en 2019). El gasto medio de los turistas durante su estancia también se está recuperando: en 2022 fue de 950,6 euros, cantidad que se acerca a los 991,5 euros de 2019.

Los establecimientos hoteleros de L’Hospitalet cerraron el año 2023 con más de un millón de pernoctaciones, en concreto 1.051.000, superando por primera vez la cifra
del millón. Durante el mismo periodo, la ciudad acogió a a 470.100 viajeros, una
cifra récord que supera los datos de antes de la pandemia (381.200 en 2019 y
355.800 en 2018), según constata el propio Ayuntamiento de L’Hospitalet en un
comunicado. Un 68,81% de los viajeros fueron extranjeros (323.467 personas) y
un 31,19 % del Estado (146.618 personas).