La inmobiliaria pertenece a fondo de inversión norteamericano desde hace 4 años
Desde hace cosa de un mes, los compradores que ya han firmado el contrato de arras en la promoción de la inmobiliaria Culmia Can Batllori en los terrenos de la antigua fábrica Tecla Sala, están recibiendo de la comercializadora Redes Promotora 9, una información según la cual daban cuenta a esos clientes del inicio de procedimientos judiciales cuestionando la legalidad de la Modificación Puntual del Plan General Metropolitano en el sector comprendido entre las calles Prat de la Riba, Tarradellas, Batllori y Canigó, que les podía afectar en la adquisición de sus viviendas.
Se trata de la interposición de una denuncia sobre la ilegalidad del planeamiento en base a lo que la ley garantiza respecto de las horas de sol que cualquier vivienda de nueva construcción debe tener como ya se informó en su momento en este medio (https://lestacarevista.wordpress.com/2024/03/28/).
En la carta remitida a los clientes se les comunica que Redes Promotora 9 se ha personado en los procedimientos judiciales con el objetivo de defender la validez del planeamiento tal como está construido, de forma tal que su actitud pone de manifiesto que la promotora estaba absolutamente al corriente de la supuesta vulneración de la ley. Lo más significativo, sin embargo, es que la comercializadora afirma que la existencia del procedimiento judicial no afecta en estos momentos al plazo de entrega de las viviendas y no limita los derechos de quienes ya se han comprometido al pago de arras en el proceso de escritura ni en la posesión de lo adquirido, pese a que, si la justicia da la razón a los demandantes, varios de los pisos de la promoción estarían fuera de la ley.
La Inmobiliaria, que se ha visto obligada a transmitir a los compradores los imprevisibles obstáculos que se han producido con la denuncia, se compromete, en la carta, a mantener a sus clientes informados de lo que pueda ocurrir.
La promotora inmobiliaria Culmia que estuvo vinculada en sus inicios al Banco Sabadell, fue el resultado de la compra de la antigua Solvia Desarrollos Inmobiliarios (Sdin) por el fondo norteamericano Oaktree Capital Management, y ahora es totalmente independiente del banco. La venta tuvo lugar formalmente en septiembre de 2020 y generó una plusvalía de 8 millones de euros después de impuestos. La operación, valorada en 882 millones de euros, se cerró una vez obtenidos los permisos pertinentes de las autoridades. La entidad presidida por Josep Oliu y ahora en plena actualidad por la Opa hostil del BBVA, dio en su momento poderes a la promotora para que gestionara los proyectos residenciales que ya estaban en marcha antes de la venta junto con los suelos urbanos adquiridos, entre ellos este de la Cosme Toda.
De hecho, por lo que esta redacción ha podido comprobar, las obras de construcción no se han paralizado en la mayoría de las promociones pese a que la venta y la ocupación de viviendas se han ralentizado notablemente, aunque no se ha podido comprobar que la causa directa haya sido el procedimiento judicial ahora en curso, pero tampoco es descartable.