Cruz Roja atiende el doble de personas en 2020 por la pandemia Covid-19

Programa para garantizar la alimentación infantil a familias en situación de extrema vulnerabilidad / Fuente: web oficial de Cruz Roja Cataluña

Las personas que requieren de los servicios de la Cruz Roja de L’Hospitalet de Llobregat aumentan de 4.000 en 2019 a más de 7.000 entre los meses de marzo y septiembre de 2020. La actuación de la Cruz Roja constata que no solo se trata de una crisis sanitaria, sino también de una crisis social y económica

17 de diciembre, 2020

Uno de los objetivos centrales de la organización recae en dar respuesta y comprometerse con las situaciones de vulnerabilidad. Los datos del 2019 revelan que de las más de 4.000 personas atendidas por Cruz Roja, 3.000 de ellas se encontraban en una situación de extrema vulnerabilidad. Sin embargo, a raíz de la crisis sanitaria del 2020, el número de personas en esta situación ha aumentado. Alfons Molons, coordinador local de la Cruz Roja, alerta que “la crisis sanitaria ha comportado una crisis social y económica que se mantendrá después de que la pandemia termine”. 

Los autónomos, las personas en situación laboral precaria y la economía sumergida son los más afectados

Además de las personas usuarias que ya precisaban de la atención de Cruz Roja, tal y como dice Alfons Molons, se han sumado nuevo perfiles de personas usuarias, como autónomos, personas en situación laboral precaria y personas que trabajaban en la economía sumergida, que requieren de las ayudas de la organización a raíz de la crisis del Covid-19. Este hecho es un indicador de la crisis social y económica que acompaña la crisis sanitaria; una crisis que, como indica el coordinador de la entidad, puede extenderse más allá de la pandemia.

Según fuentes de la organización, desde marzo a septiembre Cruz Roja ha atendido a 7.887 personas, un aumento significativo respecto los datos del año 2019 con 4.769 personas asistidas. Asimismo, se han realizado 4.360 llamadas de seguimiento, prevención y sensibilización.

Un nuevo punto de distribución de alimentos desde Tecla Sala

Se han activado programas prioritariamente para cubrir las primeras necesidades. El proyecto más significativo es la cesión de un espacio del Centro de Arte Tecla Sala para habilitar un punto de recogida y distribución de alimentos y material de higiene. El espacio de Tecla Sala ha sido cedido por el Ayuntamiento de L’Hospitalet de Llobregat, como explica Alfons Molons, “un espacio que garantiza la seguridad de las personas voluntarias, técnicas y usuarias”.

Otro proyecto significativo es la entrega de alimentos y material de higiene a domicilio durante el período de confinamiento a personas mayores o familias monoparentales. Más allá de la entrega, también se ha acompañado a las personas de la tercera edad que viven solas. Entre otras cosas, el acompañamiento ha consistido en facilitar el uso de las nuevas tecnologías para ponerse en contacto con sus familiares.

La situación más extrema de pobreza y exclusión se corresponde con las personas que viven en la calle. En este sentido, y dado que su situación ha sido agravada por la crisis del Covid-19, la ONG ha reforzado las ayudas y el seguimiento hacia este colectivo. Desde mayo hasta septiembre se ha proporcionado un picnic diario a 21 personas sintecho. El programa incluía, además, una ruta semanal donde se facilitaba un seguimiento, información y asesoramiento sobre los recursos disponibles y los servicios a su alcance para ayudar-les en esta situación. La ruta semanal ha permitido atender y hacer el seguimiento de 23 personas.

257 voluntarios movilizados

Con la situación provocada por la crisis sanitaria no solo ha aumentado el número de personas que requieren de las ayudas de la entidad, sino también, como valora Alfons Molons, ha aumentado el número de personas voluntarias y de las aportaciones y donaciones económicas tanto de particulares como de grandes y pequeñas empresas.

Es importante destacar el aumento de las personas voluntarias de L’Hospitalet de Llobregat en la situación excepcional ocasionada por el Covid-19. Sin estas aportaciones, a nivel de tiempo y recursos, no se podría haber llegado a todas las personas que precisaban de ayuda.

Los programas que desarrolla la Cruz Roja responden al compromiso con la transformación social, la utilidad pública, y los valores de la humanidad y la dignidad.

Por Carme Palacios