La cultura al alcance de un “click”

Cartel de los horarios de atención de la biblioteca de Bellvitge (Fuentet: web BibliotequesLH).

Las bibliotecas de l’Hospitalet se han volcado en adaptar sus servicios de libros y actividades al mundo online desde inicios de la pandemia 

Ante la imposibilidad de realizar actividades presenciales hasta alrededor de dos o tres meses después del confinamiento domiciliario de la primera ola, las bibliotecas buscaron realizar el máximo número de talleres desde el portal virtual. De esa manera los usuarios podrían seguir participando en ellos desde sus casas, sobre todo en aquellos casos en los que era fácil encontrar medios para seguir desarrollándolos.

”Utilizamos una cuenta de Instagram en l’Hospitalet para actividades infantiles como la hora del cuento”, relata Ilumi Ramos, directora de la Biblioteca La Bòbila. Y al igual que esa, también se fueron impartiendo de forma online los grupos de conversación en catalán e inglés, el videoforum y, alguna que otra vez, pudieron hacer a través de WhatsApp alguna experiencia con el club de lectura en voz alta. 

“Nuestras plataformas de descarga de libros electrónicos se dispararon” menciona David Urrea, subdirector de la biblioteca Tecla Sala. Él añade que hubo un momento que incluso llegaron a tener problemas técnicos por verse incapaces de sostener tantas peticiones. “No están todos los libros que tenemos en físico, pero sí que hay novedades, diarios y películas que se pueden consultar con el carnet desde la web”, señala Ramos, ya que el fondo del material físico del que disponen lleva formándose desde hace mucho tiempo.

Por otro lado, el número de licencias que existían en la plataforma ebiblio, la cual utilizan todas las bibliotecas en l’Hospitalet, ha experimentado un gran crecimiento en comparación con el tiempo previo a la pandemia. Cabe destacar que el año anterior la Diputación de Barcelona y el resto de las instituciones que participan en el ebiblio incrementaron la oferta y aumentaron las licencias, cosa que a la larga ayuda a plantear cambios en la plataforma. “La oferta para libros electrónicos va a ir creciendo, pero todavía son alrededor de entre un 12 y 20% los que prefieren utilizar formato virtual para leer” menciona Urrea, dejando claro que la mayoría sigue prefiriendo el papel.

“Intentamos organizar los distintos equipos que trabajan en las bibliotecas para coordinarnos” cuenta él. Las medidas de seguridad se tomaron de manera equitativa en todas las bibliotecas de l’Hospitalet. A partir de unas fases se empezó a controlar el nivel de aforo, los accesos a las salas y el control del material. “Cualquier libro que se toque o se retorne de préstamo, se pone en cuarentena durante 48h”, indica la directora de la biblioteca La Bòbila. Ella misma explica que desde un primer momento se prepararon para que aquellos fueran espacios seguros y alega que “por eso siguen manteniéndose abiertos.”

“En las últimas semanas hemos hecho la formación a los conductores del grupo de alemán para que sepan como es el tema de compartir pantalla y así” señala Urrea, quien también menciona que se implementaron medidas especiales para solicitar internet de forma temporal a través de la página web. “Nos encontramos  usuarios sin los medios necesarios para poder seguir con este tipo de actividad”. Pero al mismo tiempo, reconoce que hay actividades que han sido mucho más fáciles y ventajosas vía online y que se mantendrán incluso cuando llegue la normalidad. Como él dice, “hay gente que estaba conectada tal día, tal hora, podían hacer preguntas, pero también están aquellos que pueden hacer el seguimiento en vídeos YouTube”. 

Por lo tanto, la intención general es poder realizar actividades siguiendo un modelo híbrido para los que quieran acceder desde casa y para los que quieran asistir de forma presencial. “El espacio físico también es importante para una extensa parte de la población que no tiene medios tecnológicos o que necesita del contacto humano y reencontrarse”, menciona Ramos. Ella recuerda que las bibliotecas tradicionalmente se han utilizado como un espacio donde socializar con amigos y familia. Y en eso también está de acuerdo el subdirector de la biblioteca Tecla Sala. “Trataremos de complementar ambas modalidades con las posibilidades que tengamos a nuestro alcance”. 

L’Hospitalet crecerá con 765 viviendas más

Manzana donde se construirán las nuevas viviendas.

El actual consistorio se ha propuesto llegar a los 300.000 habitantes a costa de lo que sea. En la actualidad ya cuenta con 269.382, la cifra más alta de la ciudad.

La Comisión Territorial de Urbanismo del Ámbito Metropolitano de Barcelona ha aprobado esta semana de forma definitiva la remodelación del sector Rambla del Mig II de l’Hospitalet. El pleno del ayuntamiento de la ciudad lo había hecho en diciembre del 2020.

En este proyecto se prevé la construcción de una ‘supermanzana’ con 765 nuevas viviendas, de las cuales 516 serán a precio de mercado y el resto, 249, de protección oficial o de precio concertado, El Plan permite transformar el antiguo sector industrial de la Rambla del Mig II en una nueva ‘supermanzana’ residencial con equipamientos y espacios verdes.

La zona se sitúa al suroeste de L’Hospitalet, al norte de la Gran Vía, entre la avenida del Carrilet y la Travesía Industrial, Concretamente el proyecto está delimitado por las calles Cobalt, avinguda Pau Casals, la carretera del Mig y la Rambla Marina, con una superficie de 53.079 metros cuadrados de suelo. De los cuales, 7.210 m² será para equipamientos y 9.265 m² para espacios libres. El resto para viviendas. Entre los usos que se admitirán están los de oficinas, comercial, sanitario, deportivo, recreativo, religioso y cultural, residencial y terciario

El Ayuntamiento ha propuesto desarrollar este sector con un concepto de ‘supermanzana’, que reduzca al máximo el tráfico rodado en su interior, por lo que la ordenación vela por garantizar la relación con la ciudad y las calles circundantes; los itinerarios internos de la propia isla y, finalmente, con la nueva zona verde generada.