La familia ha denunciado la desaparición de sus bienes personales, entre los que destacan una televisión, joyas y unas memorias manuscritas que la afectada estaba redactando
Muchos de ustedes recordarán el drama por el que ha estado pasando recientemente Rosario Bravo, vecina de L’Hospitalet. Ella es la anciana de 97 años que el pasado mes de febrero fue desahuciada por error y que, como consecuencia, perdió gran parte de sus bienes personales, viéndose obligada a mudarse a casa de su hijo, Emiliano Caballero.
Ahora, tres meses después de aquella inadmisible equivocación, ha vuelto a vivir a su casa -ubicada en la Ronda de la Torrassa- y aún nadie ha asumido responsabilidades por lo sucedido. Rosario ha regresado a la casa en la que ha vivido durante más de 60 años, acompañada -por ahora- de un nieto que vive cerca y que pasará las primeras noches con ella para hacerle compañía.
“Sus cosas no están”, denuncia su hijo
Han tenido que pasar tres meses del erróneo desahucio -recordemos que el piso que se debía desalojar era el ático primera y no el sobreático primera donde vive Rosario- para que el juzgado de instrucción número 8 de l’Hospitalet ordenara la devolución de los enseres personales de Rosario. Así pues, la anciana y su familia han decidido amueblar de nuevo el piso para que pueda volver a vivir en él.
En declaraciones a la agencia EFE, su hijo Emiliano subraya que Rosario aún echa en falta varios enseres personales: “Ya está en su casa, pero nota que es su cama, no son sus sábanas y que sus cosas no están”, sentencia. Al respecto, ha añadido: “les importa un carajo, es patético”, ya que lamenta que nadie haya hecho nada para reclamar la devolución de los objetos personales de su madre.
Reuniones insignificantes con el consistorio y la Generalitat
La familia y la propia afectada, quiénes se han reunido durante estos meses atrás con los máximos responsables políticos de la ciudad y la Generalitat -fruto del revuelo mediático del caso-, siguen sin poder recuperar los bienes personales de Rosario. Sólo han recibido que buenas palabras de la alcaldesa Núria Marín y la consejera de Justicia, Ester Capella, pero nada más.
Sumada a la petición de nulidad del desahucio, la familia también ha presentado una denuncia penal por los delitos de robo, prevaricación, hurto y allanamiento de morada, que ya ha sido admitida a trámite. En breves, además, presentarán otra de civil para reclamar una indemnización por el enorme daño moral causado y por los bienes que han sido sustraídos; entre ellos unas memorias manuscritas de casi setenta páginas que la anciana estaba redactando.
Finalmente, Emiliano aclara que vive toda esta situación con mucha rabia: “¿cómo puede ser que haya gente tan mala en el mundo para hacer estas cosas? ¿Cuánto vale la foto de mi padre, hecha en el año 1950, que es la única que tenía mi madre de ellos dos? ¿Cuánto vale la mantilla de mi abuela? Te ves impotente.”
Publicado por Fran Torres