Las entidades de Collblanc también se muestran contrarias a las dos nuevas residencias estudiantiles que aprobó el pleno

Reclaman que la necesidad del barrio se centra en liberar suelo para equipamientos, viviendas asequibles y zonas verdes

La autorización de nuevas residencias de estudiantes en Collblanc (dos en concreto) ha provocado la ira de las entidades de la zona quienes consideran que existen otras prioridades y necesidades en la barriada como la construcción de nuevos equipamientos, de vivienda protegida y asequible y la compra de suelo público. (Foto de Portada: Residencia Estudiantil en Travessera de Collblanc)

La existencia de estas residencias para lo único que sirve es para que el resto de las viviendas del barrio vean incrementados sus precios tanto en lo que respecta al alquiler como a la compra. El precio de una habitación en estos edificios estudiantiles puede oscilar entre los 700 y los 1.000 euros/mes. “La construcción de estas residencias estudiantiles representa un gran negocio para estas inmobiliarias involucradas gracias a la gran proximidad de la Universidad de Barcelona a l’Hospitalet”, afirman de forma unánime las entidades del barrio

Collblanc tiene contabilizadas, con estas dos nuevas aprobadas en el pleno —gracias al voto de calidad del alcalde porque en ese pleno estaba ausente un concejal del PP—, hasta cinco residencias para estudiantes. Una de las nuevas es la ampliación de una existente en Travessera de Collblanc, perteneciente al grupo Nodis, y la otra se ubicará en la confluencia de las calles Vallparda/Cotonat, donde anteriormente había un parking privado.

También existe otra cerca del mercado de Collblanc perteneciente al grupo Xior y una más en la calle Rafael Campalans. A todas ellas hay que añadir, según manifestó David Crespí, representante de la Coordinadora d’Ampes Endavant de Collblanc-La Torrassa, “las que se ubican en el municipio colindante justo en la misma frontera con l’Hospitalet, en la misma Riera Blanca”.

Esta barriada tiene, además, como otro lastre, la presión de los fondos buitres que están comprando viviendas y echando a sus inquilinos para transformarlos en pisos turísticos. Ambos hechos crean en la barriada una situación grave que repercute directamente en los precios de los pisos y ha provocado “la expulsión” de muchos vecinos que vivían en la zona.

Collblanc es uno de los barrios más densos de toda Europa con 54.163 habitantes por kilómetro cuadrado, según la Oficina Estadística de la Unión Europea “Eurostat” que publicó en el 2023 un estudio sobre la población en las grandes ciudades europeas (https://ec.europa.eu/eurostat/en/web/products-eurostat-news/w/DDN-20230330-2). Y, a pesar de la necesidad de esponjar esta zona, cada día se pueden ver nuevas construcciones sin que se recuperen terrenos para equipamientos públicos.

Como decíamos, el último pleno municipal aprobó in extremis, con 13 votos a favor y 13 en contra, la autorización de las dos nuevas residencias. Toda la oposición mostró su desacuerdo con la medida y votó en contra, pero no consiguió ningún resultado porque de los 14 concejales de la oposición, uno estaba ausente. Al final se decidió por el voto de calidad del alcalde que vale doble en caso de empate. (https://lestaca.com/lestacalh/el-ple-municipal-aprova-amb-el-vot-de-qualitat-de-lalcalde-dues-noves-residencies-destudiants-que-no-fan-cap-falta-a-un-dels-barris-mes-densificats-deuropa/)

Mientras que el portavoz socialista, José Antonio Alcaide, defendió la aprobación de los dos expedientes manifestando que “como ayuntamiento no podemos ni debemos impedir de forma discrecional una tramitación que cumple con la legalidad”, la oposición de forma unánime denunció que este hecho solo beneficiaba a la especulación e incrementaba la situación de deterioro del barrio de Collblanc.

Manuel Domínguez, portavoz de los Comunes, afirmó que “no se pueden considerar las residencias estudiantiles como un equipamiento docente”, como aseguró el representante socialista en su intervención. “Son un negocio privado tipo hotel donde se alojan personas ajenas a la ciudad” y continuó: “se está cediendo terreno de Collblanc a un negocio privado cuando hay un acuerdo y opinión unánime del propio gobierno de la ciudad del grave problema de esta barriada de falta de espacio público. No se puede construir más. Tenemos una extraordinaria ocupación del suelo”.

“Hemos reclamado en diferentes ocasiones la elaboración del Plan de Usos y donde sea consideradas las residencias estudiantiles como viviendas turísticas ya son ajenas a la ciudad”, afirmó Domínguez quien añadió que “también hemos requerido al actual gobierno de la ciudad la compra de suelo por parte de la administración municipal para ser empleado para la comunidad ya sea en equipamientos, zonas verdes o viviendas públicas y asequibles”.

ERC+EUiA también tuvo una postura similar en contra de la construcción de más hoteles, residencias estudiantiles y pisos turísticoa. “Necesitamos más espacios para escuelas, zonas verdes, equipamientos…”, dijo Jaume Graells en el pleno municipal y apuntó que “este tipo de urbanismo de la ciudad solo está al servicio de los especuladores” y “lo único que genera es la subida de los precios de la vivienda y agranda el grave problema de masificación de los barrios”.

El representante de VOX llegó a manifestar que este tipo de residencias está al servicio de la ciudad de Barcelona y no de l’Hospitalet y reclamó que el barrio de Collblanc lo que necesita son residencias para los ancianos.

La portavoz del PP, Sonia Esplugues, también de la misma opinión que el resto de portavoces contra estos alojamientos para estudiantes, denunció en el pleno que en el barrio de Collblanc precisamente brillan por su ausencia los espacios para los vecinos y apuntó al gobierno municipal que vele para que las residencias estudiantiles no se conviertan en residencias turísticas.

Ahora son los vecinos quienes han mostrado su desacuerdo: “La barriada necesita equipamientos como guarderías, escuelas o refugios climáticos, no nuevas residencias de estudiantes”, dice David Crespí, y sentencian: “Las residencias de estudiantes como los pisos turísticos comportan un incremento de los precios tanto de los alquileres como de las viviendas”.

Otras entidades también han mostrado su desacuerdo y piensan que las residencias no aportan nada al barrio. “Dentro de poco habrá más personas foráneas que autóctonos”, ha denunciado un representante de la entidad Contra la Especulación Inmobiliaria y la Masificación Turística (CEIMT) de l’Hospitalet. l

El ayuntamiento ya ha tomado medidas sobre los pisos turísticos con una moratoria de un año para la autorización de viviendas de uso turístico, hostales, pensiones y albergues de juventud, fruto del acuerdo entre Socialistas y Comunes. En este mes de julio, fue ampliado a los apartamentos. Toda esta normativa, provisional, está pendiente de una aprobación definitiva sobre las licencias de usos de las viviendas que el gobierno municipal ha prometido que se realizará en el próximo trimestre, así como también el Pla de l’Habitatge para l’Hospitalet.

Però, realment existeix l’Hospitalet com a ciutat?

En el que portem d’any el govern municipal intenta ocupar l’espai comunicatiu amb la celebració d’un títol de ciutat inútil i atorgat per una dictadura. Però més enllà de celebracions sense sentit, la qüestió que hauria de preocupar és la pròpia existència de l’Hospitalet com a ciutat.

Fa uns dies, una parella d’”influencers” poc documentades, feien un viatge. Segons elles, per un des barris més perillosos de Barcelona, el barri de La Florida. Realment el seu passeig no va ser per Barcelona, ni tampoc pel barri de La Florida. Van passar per uns quants carrers de Pubilla Cases i de Can Vidalet, ja a Esplugues. Però la polèmica que van aixecar obviava la seva confusió de ciutat; de fet, encara ara un cert gruix del veïnat creu que viu a la capital del país i, especialment la majoria de persones que ocupen per un cert temps els habitatges turístics, el hotels o, fins i tot, les anomenades “residencies d’estudiants” creuen que dormen a Barcelona. (Foto de portada:Mapa de la lluita veïnal a l’Hospitalet)

La confusió pot explicar-se per la pròpia configuració de la ciutat de l’Hospitalet i, també, pel model de ciutat que impulsen els diferents governs municipals. En la pràctica els ajuntaments de la democràcia han desenvolupat un model de ciutat de continuïtat amb els models especulatius i “desarrollistes” dels consistoris franquistes. És cert que aquesta afirmació no seria del tot real pel que fa als primers anys de l’ajuntament democràtic, en el que el model de ciutat a implementar, provocava no poques tensions entre els grups municipals del PSC i del PSUC.

El model que finalment es va aplicar, va centrar-se en facilitar la continuïtat de la construcció de blocs i torres, que només en alguns casos eren frenats o limitats per la mobilització veïnal. Tot sembla valer per augmentar els ingressos per l’IBI o per les llicències de nova construcció. Si això anava escombrant el patrimoni industrial o la història dels diferents barris, poc importava.

Concentració veïnal davant de l’Ajuntament

L’Hospitalet ha tingut una dinàmica de construcció com a ciutat no gaire típica. Habitualment, el desenvolupament urbanístic de les ciutats ha partit d’un centre que s’anava ampliant més o menys en forma concèntrica i que, especialment en l’àrea metropolitana, creava una mena de bolets farcits de blocs i torres com si fossin uns satèl·lits.

En el nostre cas, la cosa no ha anat d’aquesta manera més clàssica, en la que las poblacions es creaven al voltant d’una església, d’un castell o d’un mercat; com li agrada explicar al Manuel Domínguez, el barri del Centre, el que dona nom a la ciutat va créixer al voltant d’un hostal; Santa Eulàlia va deixar de banda la seva ermita i es va desenvolupar al voltant de fàbriques tèxtils; Collblanc, més enllà de ser proper al Sants fabril, va créixer seguint bòviles, com en part ho van fer Pubilla Cases i La Florida. La Torrassa va acollir la immigració d’inicis del segle XX, així com més tard van fer-se operacions especulatives com a Bellvitge, a Can Serra o El Gornal, i així, barri a barri.

És doncs a cada barri on el veïnat construeix una part de la seva identitat, del seu sentiment de pertinença. És en el barri on es participa, de manera conscient o no, en la configuració d’una certa memòria col·lectiva. Quan el barri és estigmatitzat, com era (i en part encara és) el cas de La Torrassa i ara de La Florida i Les Planes, o s’assumeixi o no aquest fet, o difícilment se’n podrà fugir del que acaba sent un realitat, més enllà de la voluntat dels seus protagonistes.

Trobada veïnal a Can Trinxet

A altres ciutats de l’àrea metropolitana la identitat del veïnat es forja, amb orgull o sense, en la mateixa ciutat i la pertinença a un o altre barri apareix com a secundari. A l’Hospitalet aquesta identitat difícilment supera els límits del barri, de la seva història i de la memòria col·lectiva. La mateixa trama urbana que el veïnat ha anat configurant forma part del seu patrimoni. No resulta casual que l’urbanisme que es practica avui a la nostre ciutat busqui trencar conscientment aquet patrimoni. Els nous blocs trenquen la conservació i la continuïtat d’aquesta trama urbana. Només cal veure el que es construeix a Cosme Toda, al barri de Sant Josep, o els blocs que es fan a la part sud de la Avda. Carrilet.

Segurament no és en absolut casualitat que cap dels grans equips esportius de la ciutat acullin molt suport del veïnat. En el basquet, a diferència de Badalona, l’equip del Centre Catòlic, un dels pioners d’aquest esport a Catalunya, no disposa d’una audiència gaire nombrosa. El Centre d’Esports Hospitalet, al menys fins ara, no provoca cap mena d’allau de suport. L’assistència a l’estadi és força minsa per una ciutat del volum de la nostre. Caldrà veure si ara, amb la iniciativa de transformar el club en una societat anònima esportiva que protagonitza Tomi Garcia, el nou president, l’arrelament del club canvia.

El govern municipal treballa voluntàriament d’esquena a aquesta realitat dels barris de la ciutat. La centralització i la homogeneïtzació és la seva manera de treballar. No resulta casual que la definicio dels districtes passi per damunt dels barris, ni tampoc que es buidin de contingut reals els Consells de Districte que existeixen per mandat legal, més enllà de la voluntat del govern. Que cada regidor o regidora tingui sota la seva responsabilitat dos districtes és una prova clara del lloc que ocupa en les preocupacions del govern municipal.

Caldria doncs assumir que l’Hospitalet només existeix en els seus barris, que malgrat tots els esforços centralitzadors dels diferents governs del PSC és en els barris on s’expressa la vitalitat del veïnat. Sense reconèixer aquesta realitat és fa molt difícil aconseguir bastir una política municipal que atengui les necessitats i les aspiracions del veïnat de cada barri.

Segur que per fer operacions urbanístiques i immobiliàries amb un fort aroma especulatiu com les que s’han fet per exemple a la plaça Europa i a la Fira, com les que s’estan fet a Cosme Toda i les que s’anuncien al Samontà, al voltant de Can Rigal, i en l’anomenat Biopol, la centralitat al barris pot ser un obstacle. Tot els va millor si, com sempre s’ha fet, es prenen les decisions sobre mapes un algun despatx allunyat de la realitat que envolta aquests projectes.

Veïnat reivindicatiu en un Ple Municipal

Fins fa poc, tot es decidia a l’ADU (Agència de Desenvolupament Urbà) tancada en una mena de búnquer a la entrada del carrer Xipreret. Ara, les decisions urbanístiques depenen d’un consorci, com el de la Granvia i el Samontà, on els barris i el seu veïnat resten exclosos. Ni tant sols el Ple municipal hi participa dels projectes que es cuinen, pel que sembla, en una antigua masia rehabilitada a la Marina.

Canviar aquesta dinàmica establerta al llarg dels anys no resulta fàcil. Hi ha tot de dinàmiques establertes entre empreses immobiliàries i d’altres que, lluny dels focus i la llum del veïnat, van fent els seus negocis i definint una ciutat lligada als seus interessos. Quan més lluny de la ciutadania estan els llocs polítics de decisió, més feble és la democràcia i el control dels governants.

El que sembla una certa recuperació del moviment veïnal i dels moviments socials de l’Hospitalet també succeeix fonamentalment des dels barris. Les associacions veïnals renovades; les plataformes en defensa del patrimoni, com Can Trinxet Viu, el Castell de Bellvís o Albert Germans i moviments com No Més Blocs o l’Hospitalet Verd, tenen les seves arrels en els diferents barris. De moment, al menys, les iniciatives de coordinació de tot plegat que vol representar Un Altre L’Hospitalet és possible, només han iniciat el seu camí. Al mateix temps, l’Espai de Ciutadania es consolida com espai de trobada del moviment associatiu de la ciutat.

Per això, també seria bo imaginar una ciutat concebuda com una federació de barris, on les decisions poguessin efectivament ser discutides de manera propera pel veïnat. Les actuals lleis que afecten als ajuntaments no son gaire favorables, per dir-ho finament, a afavorir aquestes possibilitats. Però tot i així, la llei pot  estirar-se per apropar la capacitat de decisió als barris, creant uns Consells de Barri realment representatius de cada realitat i amb capacitat de decidir tot allò que els afecta. Només caldria la voluntat de fer-ho, recollint també la tradició llibertària i federal encara present en el nostre país.

D’aquí a un parell d’anys torna a haver eleccions municipals; aquesta concepció podria ser un tema de debat que pot ajudar, ara sí, a construir un l’Hospitalet real, una ciutat concebuda com a confluència de cada un dels seus barris. Llavors, potser sí, podríem considerar que l’Hospitalet ha esdevingut una ciutat real.

Autoestima, cultura i ganes de treballar

Feia quasi un any que no agafava la bici, una estranya malaltia muscular m’ho havia impedit, sortosament resolta gràcies a l’entestament i perícia de la meva metgessa de capçalera. I un cop recuperat, el primer que vaig fer és tornar a agafar el camí del riu que, ves per on, no fa pas gaire em van dir que el nou consistori, que de nou només sembla tenir una afició per deixar de costat al voluntariat, havia pres la lloable decisió de netejar el camí.
Santa innocència!, no la meva òbviament, sinó la del qui creia que alguna cosa havia millorat. El camí sembla net, algú ha passat i ha recollit infinitat de plàstics i merda varia, no sé si els serveis de neteja o un grup de voluntaris, perquè en tot el seu recorregut està sembrat de sacs de plàstic, com si un d’aquests últims haguessin fet la feina, esperant, possiblement, que els serveis tot seguit els recollissin després d’haver-ho pactat. Això és el que imagino, perquè els serveis de la neteja sempre van acompanyats d’un vehicle i aquest no ha sigut el cas. I és que els sacs, tots ells, estan rebentats amb la merda escampada per la vegetació. Mira per on, ara tenim la mateixa merda de plàstics, amb l’afegit dels sacs!
Haig de reconèixer que, dos dies després els sacs havien desaparegut, juntament amb part de la merda escampada, el que em fa pensar que l’operació no era del voluntariat sinó dels mateixos serveis de neteja, descoordinats probablement per motiu de les vacances.

Malauradament no tot acaba aquí. Des del començament del camí, just on els usuaris i els treballadors de l’hospital aparquen els seus vehicles, es poden veure cents de quilos de porqueria antediluviana, això últim per dir alguna cosa. Restes de sabates, milers de plantilles sobretot, se suposa que fetes d’un material més resistent que les pròpies sabates, ampolles que deuen tenir més de deu anys, i restes de productes difícils de qualificar per la seva antiguitat. I això ens fa pensar sobre el que hi deu haver enterrat, suposem que per deixar material d’investigació a futurs arqueòlegs, cosa que no se’ns havia ocorregut. De fet, si ho pensem amb una mica de perspectiva, d’aquí a mil anys, els nostres descendents agrairan tanta cura del nostre govern municipal per deixar enterrades proves de la nostra cultura; perquè si remenen més enllà, a Cornellà o el Prat, van aviats, allí no trobaran res per estudiar.

Fora bromes, penso que el problema de l’Hospitalet ja no solament és de mal govern. Això podria ser explicable si després d’una o dues legislatures la cosa canviés o, si més no, es reduís considerablement, perquè donaria a entendre que, bé o malament, s’intenta posar remei, però queda claríssim que no és el cas. Cap govern, empresa o particular, repeteix els mateixos errors durant decennis si no és a propòsit o perquè tant se li’n fot. El problema de la brutícia de l’Hospitalet, la seva deixadesa, és estructural i cultural. No hi ha altra explicació. L’ajuntament va a cops de queixa, sempre i quan aquesta afecti al seu electorat. Si els contenidors arrebossen merda no passa res, si algú es queixa sí, llavors es posa remei. Si enfront una plaga de cuques ningú diu res, es fa els ulls grossos; tanmateix, si alguns veïns o botiguers es queixen, l’ajuntament es belluga, però només al lloc localitzat de la queixa —això de la pudor dels carrers i les rates és una altra cosa: les solucions deuen ser massa complexes, encara que no tant per les ciutats veïnes—. La neteja dels carrers ha millorat, però segueix sent deficient. Avui mateix i en ple agost, he pogut comptar un plàstic gran a cada deu metres, sense comptar les llaunes i ampolles diverses. Això, al final del carrer Barcelona, on la concentració d’habitants és bastant minsa, principalment en ple agost.

Aquesta cultura de la deixadesa i del mínim esforç es reflecteix clarament en el camí del riu. No cal netejar on la gent no hi viu o només circula momentàniament, per anar del seu barri o casa, a un espai verd i cuidat per a passejar, evidentment fora del municipi. Cal netejar aquests pocs cents de metres que no serveixen de res?  Ningú s’hi quedarà. Comparativament amb els de les ciutats veïnes són lletjos a parir i, fer-los bonics i interessants no aporta diners, no s’hi pot edificar. Els hospitalencs només utilitzen el camí del Prat, de Cornellà o de Sant Boi, per gaudir-ne. Pel de l’Hospitalet estrenyen el pas i intenten no mirar. De fet, ni tan sols saben si és l’Hospitalet.

Pel que fa a la merda dels aparcaments de la Residència passa el mateix. El personal sol ser d’altres ciutats, mentre que els usuaris hospitalencs hi van molt de tant en tant, i quan ho fan és per situacions que els hi fa pensar en altres coses. No surt rendible netejar-los. A més, si ho fessin es descobriria un munt de caus de rates, i això al govern municipal no l’hi acaba de fer el pes. Igual les hauria de censar o, fins i tot, empadronar.

Fa molts anys, el meu amic Josep Manuel, que en pau descansi, sent director del paisatge urbà de Barcelona, després que li cridés l’atenció sobre que constantment hi havia gent escombrant els carrers per recollir el que la gent llençava, em va explicar que era un mètode educatiu. Si la gent veu a un treballador escombrant o que acaba de passar, no llençarà res a terra. A poc poc anirem convertint una societat acostumada a embrutar la ciutat, a una que farà tot el possible per mantenir-la neta, em va dir. S’ha de dir que ho van aconseguir, però per això es necessita una cultura molt desenvolupada i ganes.

Ara bé, què podem esperar dels hospitalencs, que veuen com el seu propi ajuntament tant se li’n fot si la ciutat està neta o bruta? Sorprès estic quan veig els immigrants sud-americans o xinesos del meu barri, intentant introduir envasos de vidre i plàstics en uns contenidors on no hi cap una ploma. Em faig creus quan veig que el problema no és d’ells ni dels seus costums, sinó d’un govern que possiblement cap d’ells ha escollit. Personalment, estic fart de viatjar al tercer món, principalment a l’Àfrica. I allí hi ha de tot, però en general la gent és més sensible a la neteja, pot ser perquè els seus governs municipals intenten que les seves ciutats s’assemblin a les europees del Primer Món. Encara sort que no coneixen l’Hospitalet, una ciutat que creu que ho és per la seva ubicació o per decret, però que no ho sembla.

Òbviament, a aquests llocs també hi trobes ciutats on la gent passa olímpicament de la neteja, encara que haig de confessar que cada cop menys. Ara bé, aquestes ciutats curiosament estan habitades per persones convençudes que hi són de pas, que hi viuran uns pocs anys i marxaran tan aviat com sigui possible. A aquest Tercer Món són ciutats habitades per gent de fora, que mai se sentiran ciutadans d’elles, que treballen pel turisme o serveis de grans grups hotelers concentrats a espais d’interès turístic, on trobar un habitatge és gairebé impossible. No obstant això, si la ciutat està governada per gent amb cura i amor propi, es nota com amb el pas dels anys la situació canvia, i on fa deu veia un carrer ple d’escombraries, ara se’m fa difícil trobar plàstics pel carrer. Sembla ser que la gent del país els ha deixat de llençar a terra.
Certament, és un canvi brutal per una ciutat del Tercer Món, on tots els paràmetres socials dirien el contrari.

Com ho han aconseguit? Doncs amb treballadors escombrant constantment i entitats de voluntaris que periòdicament fan neteja de plàstics als afores de la ciutat, pels seus camins i platges, amb molt rebombori mediàtic i crides del mateix ajuntament. Entitats que el consistori cuida i ajuda, i, sobretot, on té la suficient cura de, tot seguit, passar amb un camió per recollir els sacs.

No és cosa de ser primer o Tercer Món sinó tenir autoestima, cultura i, per descomptat, ganes de treballar.

L’Hospitalet puja a l’elit del tennis taula espanyol

Per primera vegada, el Club Tennis Taula L’Hospitalet competirà a la Superdivisió Masculina, la màxima categoria estatal

El Club Tennis Taula L’Hospitalet, entitat amb més de 50 anys d’història i el club amb més socis de Catalunya en aquest esport de totes les edats i nivells, enguany afronta amb gran il·lusió un repte històric: per primera vegada competirà a la Superdivisió Masculina, la màxima categoria estatal. Una gesta que converteix al club hospitalenc en l’únic de l’àrea metropolitana amb presència a l’elit del tennis taula espanyol.

Aquest èxit representa una fita històrica per a l’entitat, un ascens que, tot i ser inesperat a l’inici de la temporada, es va anar forjant partit a partit. L’equip d’Òscar Gallego ha demostrat una gran solvència, dominant el seu grup a la lliga regular i mantenint el mateix alt nivell a la fase final. Aquest triomf culmina un cicle extraordinari per al club, que suma així dos ascensos consecutius en les dues darreres temporades.

Més enllà del vessant competitiu, el CTT L’Hospitalet és també un referent en inclusió i compromís social. Compta amb un grup d’entrenament específic per a persones diagnosticades de Parkinson, un espai pioner que contribueix al seu benestar físic i emocional. A més, treballa intensament en la formació integral dels joves, amb més de 300 socis i 14 equips en competició, des de l’etapa prebenjamí fins a veterans.

També aposta pel creixement del tennis taula femení, amb un equip campió del seu grup a la Primera Nacional Femenina i una base en consolidació que reforça la presència femenina al club i a les competicions. També el club té programes inclusius que integren edats, gèneres i persones amb diferents capacitats, donant un pas en la seva tasca per promoure la inclusió social i personal de les persones amb discapacitat i les seves famílies

Aquesta fita esportiva i social dona una visibilitat única a escala nacional i local, i és per això que el club pensa que és una gran oportunitat perquè les empreses de l’Hospitalet puguin sumar-se a aquest projecte i reforçar el seu vincle amb la ciutat en forma de patrocini. Interessats, contactar amb Roger Guarch al correu ctthospitalet@gmail.com>

Beneficis per als malats de Parkinson

Algunes dels múltiples beneficis que té la pràctica del tennis taula per a persones amb Parkinson són una millor concentració, més mobilitat muscular i un millor estat d’ànim, a més de aconseguir més flexibilitat contra la rigidesa que aporta la malaltia. Diferents estudis reforcen aquesta idea i ja són molts els clubs que estan apostant per crear la secció dins la seva estructura. El CTT L’Hospitalet és una d’aquestes entitats i el seu principal impulsor és Jaume Pou.

“Ara mateix és una malaltia que no té cura i per millorar la qualitat de vida és medicació i esport. I el tennis taula s’està destacant com el més important perquè té beneficis com la tonificació muscular, els reflexos, l’habilitat, el moviment i també un millor estat d’ànim”, ha explicat Jaume Pou a www.lhdigital.cat. Quant a la seva experiència personal, Pou ho explica de forma ràpida i clara: “Jo jugant a tennis taula soc feliç”.

La història comença el 2023, quan és diagnosticat de Parkinson i un amic l’informa dels beneficis del tennis taula. Després d’unir-se al grup especial del CTT Castellgalí, Jaume Pou va voler replicar el mateix en l’entitat de la seva ciutat. Va contactar amb el CTT L’Hospitalet i la resposta va ser immediata. “Va ser més ràpid del que jo esperava, Vaig trucar un diumenge i al cap de poc ja estava muntat”, explica.

Ara, la secció de Parkinson del CTT L’Hospitalet ja té sis membres i cada dilluns, a les 12:30h, s’uneixen per gaudir de l’esport tots plegats. “És una malaltia que porta associada també la depressió i l’apatia i el fet de tenir un grup, entrenar i riure trenca aquesta dinàmica”, explica Jaume Pou. Més enllà de la part social, el tennis taula per a persones amb Parkinson també té competició oficial. En Jaume Pou va participar en el darrer mundial i ho va fer amb gran èxit: segon en dobles i cinquè classificat en la competició individual.

Centenares de personas protestan contra los asesinatos de periodistas en Gaza: “Israel no quiere testigos del genocidio”

Desde que se inició el conflicto, en octubre hará dos años, cerca de 240 profesionales han sido asesinados por el ejercidto israelí

Cerca de mil personas asistieron ayer a la habitual concentración convocada por la “Comunitat Palestina de Catalunya” y la plataforma “Prou Complicitat amb Israel” en la plaza Sant Jaume y que este miércoles tenía un nuevo motivo: el asesinato de seis periodistas perpetrado por el ejercito israelí, en un acto selectivo el pasado domingo.

Este último hecho ha provocado un movimiento entre los profesionales de la comunicación de Catalunya que ha generado que más de 140 entidades, sindicatos, profesionales, comités de empresa, colegios profesionales y medios de comunicación catalanes (entre ellos Foment de la Informació Critica de l’Hospitalet y L’Estaca), bajo el lema “Israel no quiere testigos del genocidio”, convocaran una concentración en la plaza de Sant Jaume,  denunciando la situación que se vive en Gaza y también en las dificultades que trabajan los periodistas en este conflicto.

El acto estuvo presidido con las fotos de cinco periodistas asesinados al pasado domingo por el ejército israelí cuando atacaron una carpa de prensa situada cerca del hospital Al Shifa: Anas Al-SharifMohammed Qreiqeh, Ibrahim Zaher, Moamen Aliwa y Mohammed Noufal, todos ellos de Al Jazeera, En este mismo episodio también fue asesinado Mohamed Al Khalidi, que trabajaba para el medio palestino Sahat.

Los centenares de personas concentradas han realizado proclamas contra el genocidio de Israel y a favor del pueblo palestino. También han ondeado en la plaza decenas de banderas palestinas y algunas pancartas donde se podían leer: “Those who target the journalists, target the truth” (“Quienes atacan a periodistas, atacan la verdad”), “Pareu l’holocaust palestí” y “La historia no perdonará vuestro silencio”.

Imagen en el momento de la lectura del manifiesto

El acto se inició con una pequeña rueda de prensa delante de un gran número de medios de comunicación donde Cristina Mas, del diari Ara, haciendo de portavoz de los periodistas catalanes, ha denunciado el asesinato sistemático y organizado de periodistas por parte del ejército israelí.

En esta pequeña intervención delante de los medios de comunicación también ha intervenido la presidenta de la Comunidad Palestina de Catalunya, Natalia Abu-Sharar que ha explicado que en Gaza “hay dos millones de personas bajo los escombros” y que “están utilizando el hambre como un arma contra el pueblo palestino”.

Tras estas intervenciones, los convocantes realizaron la lectura de un manifiesto en el que se recoge las últimas palabras de Anas Al-Sharif, uno de los periodistas palestinos de Al-Jazeera, asesinado el domingo pasado, de 28 años: “Si estas palabras mías os llegan, sabed que Israel ha conseguido matarme y silenciar mi voz. He vivido el dolor en todos sus detalles, he vivido la angustia y la perdida una vez y otra, y a pesar de ello, nunca he dudado en transmitir la verdad tal como es, sin falsificaciones ni distorsiones. No olvidéis Gaza. Os encomiendo la luz de mis ojos, mi amada hija Sham y mi hijo Salah”.

Gran concentración de medios de comunicación en el acto convocado en la plaza Sant Jaume

El manifiesto fue leído por los periodistas Cristina Mas, Isabel Galí i Pilar Sampietro; la fotoperiodista Pilar Aymerich; el intérprete i periodista Miquel Jelilaty, y la profesora de universidad, Susana Pérez. Y en el mismo se indica que “el asesinato abiertamente reivindicado por las autoridades israelianas, después de una campaña de desinformación que intenta falsamente vincularlo al terrorismo”.

Con la muerte  de los seis periodistas ya suman un total de 238 profesionales de la comunicación que han sido asesinados en Gaza por el ejercito israelí desde que se inició el ataque en la franja de Gaza en octubre hará dos años, con el objetivo claro de: “Silenciar al mensajero”

El comunicado se denuncia que “Israel persigue enmudecer cualquier voz que muestre la realidad de este cruel genocidio. Por eso desde el inicio no ha dejado paso a la prensa extranjera independiente y ha amenazado y exterminado a los colegas palestinos y palestinas que se han atrevido a informar desde el terreno”. En Gaza han sido asesinados más periodistas que en la suma de la Primera y la Segunda Guerra Mundial, la Guerra de Corea y la Guerra del Vietnam.

El comunicado también manifiesta que “el Estado de Israel pretende perpetrar el genocidio contra el pueblo palestino sin testigos: es una guerra de propaganda contra el periodismo y contra la verdad. El asesinato sistemático de periodistas a Palestina es un ataque contra la libertad de prensa que nos pone en peligro a todos y nos deja más sordos y ciegos en Gaza”.

Pancartas con las fotos de los periodistas asesinados por el ejercito israelí el pasado domingo

Así mismo, el documento recuerda la situación en Cisjordania donde “los colonos armados ilegalmente y los soldados continúan ocupando tierras, expulsando poblaciones y asesinando a la población palestina”.

El manifiesto reclama que se garantice la seguridad y los derechos laborales de los profesionales que informan de Gaza y Cisjordania y asegurar la entrada sin condiciones de la prensa en Gaza. Y también que los asesinos de los periodistas sean procesados por el Tribunal Penal Internacional.

Otra de las demandas en el manifiesto respaldado por las diferentes entidades es la garantía de la libertad de prensa y reclaman al gobierno español y de la Unión Europea el embargo total de armas a Israel y la suspensión inmediata de sus vínculos con este estado hasta que no se paralice el genocidio del pueblo palestino.

Tras la lectura del manifiesto el periodista Abu Salim ha hecho llegar un audio desde Gaza para explicar que, pese a plantearse dejar el periodismo, no lo hará para explicar qué está pasando. Salim remarcó que la guerra es contra la existencia del pueblo palestino. Y ha reclamado que se presione a Israel para detener el genocidio contra periodistas y contra todo el mundo.

Nota de Prensa y Comunicado de las 140 entidades

Més d’un milió i mig de recaptació de la taxa turística de l’any passat només servirà per eixugar deute, amb les enormes necessitats que pateix la ciutat

El somni que l’Hospitalet és un municipi turístic contrasta amb els més de 400.000 euros recaptats per apartaments turístics que tant perjudiquen l’estabilitat veïnal

L’anunci de que la ciutat va recaptar l’any passat 1,6 milions d’euros gràcies a la taxa turística, ha fet que torni a posar-se d’actualitat el fenomen del turisme a la ciutat que, en puritat, no deixa de ser una simple entelèquia. Sembla evident que l’Hospitalet no té cap capacitat per ser una ciutat turística —malgrat que un reclam turístic socio-històric ben enfocat tindria algunes possibilitats— i que els ingressos per taxa es deuen exclusivament al fet que moltes de les pernoctacions en hotels o apartaments turístics es produeixen en instal·lacions que estan territorialment en aquesta ciutat tot i que el factor crida és, gairebé en exclusiva, Barcelona.  

És possible que alguns dels esdeveniments econòmics o convencions socials que hostatja La Farga anualment, també acabin convertint-se en un factor d’atracció de visitants, però és evident que el reclam de Barcelona en l’àrea directament turística o el de la Fira de Barcelona des de la perspectiva del negoci internacional, resulten cabdals en el registre de visitants i, per tant, d’ingressos per taxa. La idea que la taxa turística havia d’impactar negativament en l’afluència turística s’ha vist desmentida per la realitat i, de fet, el cobrament de la taxa sembla no haver perjudicat les empreses privades mentre que ha beneficiat especialment les Administracions que aconsegueixen d’aquesta manera uns ingressos extres molt útils per la cobertura de les necessitats potencials del mateix turisme i del conjunt de la ciutadania.

A l’octubre de l’any passat, el ple municipal va aprovar una moció dels Comuns on es demanava al govern de la Generalitat una equiparació dels preus de la taxa turística amb Barcelona que era la única ciutat, per llei, que podia aplicar un impost de 4 euros per pernoctació i persona —modificat per un nou decret aquest maig passat—. La idea era penalitzar els apartaments turístics davant la forta pressió de la ciutadania que veia com s’encaria l’oferta de lloguer i com es pressionava els llogaters perquè abandonessin els habitatges de grans propietaris. La realitat és que la taxa turística va suposar recaptar més de 400.000 euros de pernoctacions en apartaments turístics l’any passat, mentre que els altres 1,2 milions d’euros corresponen a les taxes per pernoctacions hoteleres als establiments de la ciutat i això que l’Hospitalet continua mantenint la tarifa general de tots els municipis catalans tret de Barcelona, perquè la Generalitat no ha pres cap determinació respecte de l’Hospitalet en aquest punt.

La dada d’ingressos per taxa turística, que és una conseqüència directe de la proliferació hotelera que ha viscut la ciutat des de principis de segle, contrasta, però, amb les xifres de superàvit que es venen registrant a la ciutat en els darrers anys i que, en la majoria d’ocasions serveixen directament per eixugar deute. En una ciutat amb les necessitats de l’Hospitalet, els grups municipals de l’oposició no han parat d’insistir en la desídia i la incapacitat municipal per invertir una part consolidada dels superàvit en cobrir els dèficits en zones verdes i equipaments que pateix la ciutat més saturada demogràficament d’Europa. Aquests ingressos extres de la taxa turística, en consonància, son desaprofitats obertament, de manera que mentre la majoria d’administracions del país es beneficien d’aquests ingressos per fer inversions i millores, a l’Hospitalet bona part d’aquesta recaptació va directament a eixugar els comptes bancaris.

Nota de la redacció.

Aquesta informació d’actualitat d’avui 12 d’agost de 2025 és la que fa 500, des que es va reobrir el digital de L’estaca.com. Donem novament les gràcies als lectors per la seva fidelitat.

El ple municipal aprova, amb el vot de qualitat de l’alcalde, dues noves residències d’estudiants, que no fan cap falta, a un dels barris més densificats d’Europa

Els grups municipals acusen al govern de servir els interessos immobiliaris especulatius i d’incapacitat per adquirir solars pels equipament necessaris

Els únics punts, dels 24 que conformaven l’ordre del dia del ple de juliol, on els socialistes haguessin sortit derrotats, i eren dos punts prou importants, es van aprovar amb el vot de qualitat de l’alcalde perquè no va estar present un dels regidors del grup popular. Tots dos punts corresponien a l’aprovació provisional del pla parcial urbanístic per l’edificació de sengles edificis destinats a residència d’estudiants, un situat situat entre els carrers Travessera de Collblanc i Atlàntida i l’altre a Cotonat amb Vallparda: la foto del text correspon a aquest solar que anteriorment era un pàrquing privat. Tots dos, com es pot veure, a Collblanc, en dos solars de propietat privada però qualificats com equipament comunitari, justament en un dels barris més densament poblats on el que calen son espais lliures i no residències d’estudiants que no fan falta per a res a l’Hospitalet, perquè és obvi que les residències d’estudiants a l’Hospitalet només han de servir per hostatjar estudiants de Barcelona. (Foto: Correspon al solar que anteriorment era un pàrquing privat situat en la confluència dels carrers Cotonat amb Vallparda i ara serà una residència d’estudiants).

Els arguments del grup socialista destinats a justificar uns equipaments que no li calen a la ciutat, topaven amb l’argumentació dels quatre grups municipals d’oposició que acusaven al grup socialista de seguir facilitant operacions immobiliàries especulatives, novament al servei de les necessitats de Barcelona i no pas de les pròpies. A banda, també van mostrar-se preocupats i desconfiats en el fet que les residències d’estudiants acabin convertint-se en establiments de caràcter turístic, entre altres raons perquè l’Ajuntament no disposa d’un cos suficientment ampli d’inspectors que garanteixin que es compleix la normativa.

El regidor de govern, José Antonio Alcaide, que va ser el portaveu socialista en aquest punt no va tenir cap objecció a afirmar que l’argument de parlar dels estudiants de dins i de fora de la ciutat li recordava a Trump —Alcaide és especialista en l’abús figuratiu quan se li acaben les raons— i va ser incapaç d’explicar per què atorgaven llicències d’edificació d’un equipament privat quan la ciutat necessita tants equipaments propis i especialment espais lliures en una barriada col·lapsada per la saturació demogràfica. I tampoc va saber respondre quan els grups d’oposició van posar sobre la taula la incapacitat demostrada a l’hora de gestionar l’adquisició de solars, especialment quan tots els exercicis econòmics últims mostren superàvits que acaben ingressats als bancs per disminuir deute.

En aquest sentit, en el punt que feia referència a donar compta de l’article  207 del TRLRHL respecte de l’execució del pressupost, els grups de l’oposició es van mostrar sorpresos que el capítol 6 d’inversions només s’hagi executat en un 5% quan s’han superat ja set mesos de l’exercici, precisament el capítol que hauria de resultar més actiu en un ajuntament que el que precisa és justament adquirir territori per esponjar els barris més densos i per poder planificar els equipaments deficitaris en tots els barris de la ciutat. Els grups de l’oposició van recordar, per exemple, que no es poden planificar més escoles justament perquè no hi ha solars en les condicions requerides per la Generalitat.

Com ja s’ha dit a l’inici, l’absència del regidor Díaz-Crespo del grup popular va permetre, amb el vot de qualitat de l’alcalde, aprovar aquestes dues noves residències d’estudiants a Collblanc. Ni amb tots els grups de l’oposició d’acord s’aconsegueixen aprovar punts tan polèmics com aquest. Costarà explicar als veïns de Collblanc que l’absència d’un regidor del PP ha permès perdre dos solars considerables al bell mig d’un dels barris més densificats d’Europa.

L’Hospitalet torna a aportar milions d’euros a Fira 2000, una mercantil que només registra pèrdues, amb el vist i plau de republicans i populars

Novament, pel 2026, el ple municipal considera que les festes locals de l’Hospitalet son, senzillament, les festes de Barcelona

Com ja ve sent la norma, al govern local no li fa falta tenir majoria absoluta per aprovar tots els punts de qualsevol ordre del dia dels plens municipals i això es va poder comprovar novament en el darrer ple abans de les vacances d’estiu. El que es va fer el darrer dimarts de juliol. I això que hi havia uns quants temes controvertits, entre ells la modificació del conveni de col·laboració pel finançament de l’ampliació i renovació de la Fira de Barcelona, a càrrec de la societat Fira 2000 de la que forma part l’ajuntament de l’Hospitalet i que, fins ara, només li ha reportat despeses i pèrdues econòmiques constants.

Es diria que, la posició de l’Ajuntament en aquest tema és tan qüestionable, que cap grup de l’oposició hauria d’entendre que l’Ajuntament s’hagi gastat milions de recursos públics en una empresa on l’alcalde Quirós no juga cap paper —fins i tot es va comentar que en la darrere reunió del Consell en el qual està adscrit ni va obrir la boca— i on els recursos públics s’han anat sistemàticament per un forat que ningú controla. Doncs malgrat que la portaveu popular i el portaveu republicà van criticar la manca d’autoritat i fins i tot de criteri per part del govern local, a l’hora de votar el punt, els republicans es van abstenir, cosa que sempre vol dir votar a favor de qui presenta l’expedient, i la portaveu popular va a votar a favor.

Tot i que es va avançar al 2025 la modificació del conveni de la mercantil Fira 2000 que passa de considerar les aportacions municipals com inversions a convertir-les en aportacions patrimonials per eixugar pèrdues, el punt va comptar amb el vot favorable de socialistes i PP, l’abstenció d’ERC-EUiA, i el vot en contra de Comuns i Vox. Aquests últims, curiosament, van coincidir en el diagnòstic i en el vot, argumentant que Fira 2000 és una empresa ruïnosa en la que es compta amb l’Hospitalet, mentre que Fira de Barcelona és una empresa molt rendible on l’Hospitalet no té veu ni vot. Això estava clar també pels que van aprovar el punt i van reclamar més protagonisme del representant hospitalenc, però no els va importar gaire que l’Ajuntament ara destini 2.350.000 euros a pagar els increments de preu de l’ampliació de la Fira i és possible que tingui que afegir la mateixa quantitat l’any vinent.

L’argument de PP i ERC-EUiA?. Molt senzill: que la Fira és una meravella per la ciutat, dona feina i dona prestigi. No es pot discutir que dona feina. Especialment a hotels i restaurants de la zona, que no tenen res a veure amb la ciutat —tret de pagar l’IBI— i que donen benefici als seus accionistes fonamentalment i a treballadors que no tenen per què ser necessàriament de la ciutat. Aquest és el benefici que dona i donarà la Fira: als que venen de fora, als que tenen negocis a l’Hospitalet i als que guanyen diners amb tot el que la Fira organitza en territori de l’Hospitalet sense que ni l’Ajuntament ni ningú de la ciutat tingui cap veu ni cap vot. Si en lloc de tenir la Fira a l’Hospitalet hi hagués en el seu espai un parc enorme, els residents de l’Hospitalet guanyarien qualitat de vida. Això sí, l’Ajuntament hauria perdut l’import de la llicències de construcció i els IBIS anuals. I els governants, el prestigi de passejar-se amb uns quants prohoms que se’n riuen displicentment de l’ànsia de rellevància que demostren. Si enlloc de governar els socialistes governés ERC-EUiA o el PP, la Fira seguiria fent el mateix negoci que fa ara a l’Hospitalet. La Fira de Barcelona, naturalment.

Sobre aquest tema insistirem a partir del setembre perquè és un tema tan aclaparador que mereix aprofundir-hi. Els que diuen que la Fira és una millora per la ciutat, hauran de demostrar-ho amb dades…

L’altra tema on també va haver una mica de controvèrsia —i també es va aprovar sense problemes— va ser el punt que proposava les mateixes festes locals per l’any 2026 que les previstes pel 2025, és a dir, les festes locals de Barcelona. En aquest cas va ser novament ERC-EUiA el grup que va donar ple suport al grup socialista. El seu portaveu ho va explicar tàcitament: es tracta de conciliar la vida familiar i per tant, celebrar festes locals de l’Hospitalet que no siguin les de Barcelona complica l’existència a les famílies. Estaria bé, doncs, que deixessin de parlar de festes locals. Locals vol dir pròpies. Una qüestió que està clara per tots els municipis de Catalunya. Cada municipi celebra les seves, no les del veí. Clar que, com que l’Hospitalet només és una mena de suburbi de Barcelona, el normal és que les seves festes locals no siguin les pròpies, si no les de la ciutat que ens colonitza. I després s’omplen la boca afirmant la personalitat única d’aquesta ciutat. Per riure…

En aquest cas, els Comuns i el PP es van abstenir, tot i defensar l’autonomia de les festes pròpies, perquè l’argument no és tant que cal tenir festes pròpies, com que les festes pròpies les ha de decidir la ciutadania (i si la ciutadania decideix les de Barcelona, doncs perfecte). Només Vox va votar clarament en contra, perquè celebrar les festes de la ciutat comtal és fer seguidisme de Barcelona. De tota manera, pel 2026, les festes seran novament les de Barcelona. Pel 2027, mentre s’espera la nova majoria absoluta del PSC, el tema restarà obert…