La estupidez en mi espejo

Carlos Galve Farré (activista i peixater)

Acabo de salir de una reunión de expertos. De una “taula” del Ayuntamiento de l’Hospitalet, mi amada ciudad. Estoy indignado. Por la ventana, desde mi caja de cristal, veo las Urgencias del Hospital de Bellvitge y del mundo. Mientras pienso en mi ciudad, conecto las noticias y reiteran que setenta y tres millones de ciudadanos han votado a favor de un individuo sospechoso de ser un pseudo fascista que cuestiona los derechos humanos de millones de seres humanos.

Aunque parezca que no tenga nada que ver, me preocupa que durante cuarenta y cinco años gobierne el mismo partido en mi ciudad. La situación política de EEUU no es igual que la de l’Hospitalet. Siempre he defendido que los votantes tienen sus razones y reitero mi respeto a la democracia. No la considero igual porque la degradación política que nos llega de América está ya consolidada y es de una incongruencia política y social de dimensiones abismales. 

Volviendo a l’Hospitalet, me preocupa la impasibilidad de los ciudadanos frente a la política, pero me preocupa mucho más la indiferencia o la prepotencia de los que la gobiernan. En la puerta del edificio consistorial es como si hubieran instalado una cortina invisible que impide considerar el Ayuntamiento como la casa de todos. En los bares crece la tesis: “todos los políticos son iguales”. Los grupos políticos te escuchan como posibles clientes y, mientras tanto, la extrema derecha aprovecha perfectamente la apatía y la indiferencia de la gente por la política.

Sueño que l’Hospitalet continúe siendo la ciudad acogedora con los nuevos ciudadanos que día a día configuran el nuevo vecindario. Hay mucho trabajo para explicar qué hacer con el nuevo l’Hospitalet del siglo XXI. Quizás es por la edad, pero me gusta compartir con gente crítica, la inocencia de la utopía.

Como decía Lenin “qué hacer” contra la distopía, contra el absurdo de una sociedad que camina hacia lo contrario de la justicia social. Pensar en global y actuar localmente. Sin saber muy bien por qué empiezo a escribir esta reflexión: la probabilidad de que una persona determinada, incluido yo, sea estúpida, es independiente de cualquier otra característica de la misma persona. Sinceramente, creo que la estupidez es tan humana como la sabiduría. Se puede ser iluso o incauto, reflexivo o inteligente, cabrón o malvado y, finalmente, se puede ser bobo o estúpido.

Las cuatro categorías son susceptibles de emerger en el mismo individuo en diferentes momentos de su vida. Son la cara y la cruz de la misma moneda. La estupidez es directamente proporcional a la incapacidad y a la falta de voluntad de mantener la nitidez del espejo donde nos vamos mirando cada día de nuestra vida. Me resisto a la tesis: hay seres que nacen y mueren estúpidos. La evolución se centra bajo mi punto de vista en ir intentando minimizar, al máximo posible, la estupidez. A veces, la lentitud se hace desesperante pero no es nada frente a la inmensidad del tiempo.

Los humanos vemos, fácilmente, “la mota en el ojo ajeno, y no vemos la viga, en el propio”. El viejo proverbio bíblico de San Mateo es una antiquísima lección/acción que las personas vamos repitiendo durante el transcurso de nuestra historia. El relato de los siete pecados capitales es sugerente para creer que la estupidez podría ampliarlos a ocho. Es cierto que la soberbia cruza todos los siguientes. Antes decíamos pecado y ahora creo que hemos evolucionado y decimos, actitudes o comportamientos. 

Considero esencial contextualizar el entorno para pensar en los aspectos estúpidos de los comportamientos humanos de nuestros días. Reiteradas veces me cuesta entender, por qué un gran número de conciudadanos en Occidente y sobre todo en mi ciudad, eligen opciones económicas, políticas y sociales que marcan la tendencia precisamente hacia la debilidad y el riesgo de pérdida de derechos humanos, que son básicos. 

La Salud y la Educación son esenciales, hay otros derechos opcionales importantes como el divorcio, el aborto o el derecho a elegir tu sexualidad entre muchos más. Uno de los más trascendentes es el de la igualdad de género. Parece como si hubiera sido fácil. Esos derechos parecían banales y utópicos, pero hoy, en Occidente, están irradiados en la mayoría de la sociedad. Derechos que han costado sangre sudor y lágrimas.

Me inquieta y por ello me atrevo a hablar del aumento de la estupidez, el aumento del desprecio a la democracia y, sobre todo, la intransigencia y la fragmentación de lo que llamamos —para entendernos— la izquierda a la izquierda del partido socialdemócrata.

Las diferencias entre ideologías creíamos que habían superado el riesgo de perder la democracia. No es así. La pseudo dictadura tanto política como económica de la democracia capitalista, limita los derechos básicos, los individuales y los colectivos. Los medios actúan con características gobbelianas. Una mentira repetida mil veces se convierte en una gran verdad.

Me llamaron la atención y comparto, varias reflexiones de sendos pensadores. Einstein decía: “hay dos cosas infinitas: una es el universo y la otra la estupidez humana”. Borges pensaba que “las tiranías aumentan la estupidez”, y otro decía: “Son más peligrosos los estúpidos que los malvados”.

Uno de los aspectos que más me han llamado la atención a lo largo de mi vida ha sido la reiterada evidencia de la utilización del currículum académico para enmascarar la estupidez. Si observamos el mundo, está gestionado generalmente por individuos formados en prestigiosas universidades llenas de luz y sabiduría. Es muy excepcional que un individuo inteligente y sin formación académica, llegue a tener reconocimiento para ser el que decida y proponga estrategias políticas o económicas.

Hoy tenemos en las presidencias de países poderosos a individuos indiscutiblemente muy bien formados, pero radicalmente estúpidos. Es muy grave, pero lo más grave es que están elegidos aparentemente a través de un ejercicio democrático; aunque la democracia sea de dudosa calidad, es democracia. Las votaciones son públicas. No me imagino un fraude colectivo, parece ficción, pero con la IA un día quizás podría llegar a ser posible. Lo evidente del siglo XXI será la tendencia de las próximas opciones políticas de un indiscutible retroceso en libertades individuales y colectivas.


Solo las de los poderosos serán mayores. Aunque parezca un contrasentido, los débiles, los esclavos, son los que consolidan al poder económico para retroceder y despreciar avances que ineludiblemente se volverán a reivindicar en el futuro.

Los avances son dos pasos adelante y uno atrás. Es una indiscutible actitud o comportamiento social estúpido. Estamos en el paso atrás. Manifiestamente estúpido e inexorablemente humano. Así es la evolución. ¿Igual será verdad el proverbio, que un tonto echa a perder a un pueblo? ¿O es una estupidez?

La planificación en l’Hospitalet, sometida al desorden y el caos

L’Hospitalet es una ciudad paradójica, supongo que otras también, pero hablo de la que vivo. L’Estaca publicó la semana pasada una noticia sobre un colegio, que además es instituto, el Pere Lliscart, donde se van a realizar unas obras para construir un edificio junto al existente para ubicar a unos alumnos que en la actualidad están en unos barracones.

La noticia en sí es rocambolesca porque se van a hacer las obras del nuevo edificio mientras se siguen dando clases en el centro existente que tiene casi 50 años de historia: muchas conmemoraciones tiene este año l’Hospitalet. Los padres ya han puesto el grito en el cielo, y con razón, de por qué se van a hacer unas obras, de las cuales se enteraron hace cuatro días, mientras que van a seguir funcionando las aulas en el otro centro.

Unas obras, por más que se quiera evitar según qué escenarios, que generan mucho polvo y ruidos. Hay muchos niños en esta escuela y algunos de ellos tienen algunas patologías que no son compatibles ni con el polvo ni con el ruido. ¿Las Administraciones no han considerado esta posibilidad? ¿No hay otra solución más que esta? Un posible traslado a otros centros, la realización de las obras en otro momento… esta situación está claro que no ha sido suficientemente estudiada. Pero quien al final han de pagar los platos rotos son los alumnos y los padres y también los profesores ya que han de trabajar en condiciones totalmente adversas a la tranquilidad que se necesita tanto para la impartición de clases como respecto de la atención del alumnado.

La comunidad educativa de l’Hospitalet ya denunció en su día la emergencia educativa en la ciudad: fundamentalmente faltan colegios y sitios donde construirlos, que afectan básicamente a algo tan esencial como las ratios en las aulas y la reducción de medios para impartir las clases.

Pero es curioso, que si uno se da una vuelta por la ciudad, se observa que la construcción no cesa. E incluso se proyectan grandes acumulaciones de edificios como los del Biopol de Gran Via donde se prevé la construcción de numerosos bloques y torres de 8 y 25 pisos.

Y ahora también, toda la pastilla de Can Rigalt que, con la excusa que va en esa sector el complejo del futuro Hospital Clínico, se quiere reorganizar la zona para, además de construir ese centro sanitario tan importante para toda Catalunya, levantar más de 1.000 viviendas en l’Hospitalet.

Y estas dos noticias, la primera y esta última, van relacionadas. ¿Por què? Pues sencillamente porque mientras el nuevo edificio del colegio Pere Lliscart se va a comer la mitad del patio existente, justamente 500 metros más allá existen terrenos, en los alrededores de Can Rigalt, donde se van a construir más de 1000 viviendas.

La prioridad de esta ciudad debería ser no construir más, sino adecuar los equipamientos (zonas verdes, colegios, centros sanitarios) a la población actual. Y eso no se está haciendo. Y un ejemplo es el de la escuela Pere Lliscart. Mientras se va a perder medio patio, 500 metros más allá hay terreno suficiente para construir 1.000 viviendas nuevas.

Todo es un sin sentido. Habría que darse cuenta del desorden que reina en l’Hospitalet desde hace mucho tiempo y que parece que nadie quiera verlo. Y, para acabarlo de rematar, la construcción del nuevo Hospital Clínico se va a comer el proyecto del nuevo Hospital General de l’Hospitalet tan necesario para la población norte de la ciudad. ¿Sabrá negociar el ayuntamiento y dar una salida para que en el futuro Hospital Clínico se habilite una zona para atender a la población de esos barrios y reformar el Hospital existente?

Preguntas que alguien debería responder.

De la sensación de impunidad y otras zarandajas

La justicia del país es lenta, pero hasta a veces parece que, en efecto, es justicia. Y cuando hay peticiones de chirona ni siquiera hacen falta los juicios para hacer justicia: suele haber suficiente con el pacto de conformidad o como se le llame. Esto es lo que suelen recomendar los defensores a sus defendidos: oiga, si la cosa está muy negra, déjese de filosofías y acepte lo que le den. A los Cris de Hospi les pedían chirona larga por un trapicheo de circunstancias. Tu eres el que manda y yo el que dirijo, pero como somos muy amigos, tú haces ver que me despides, cobro la indemnización, hago ver que me has dejado en el paro, cobro unos meses, y luego me das el carguillo prometido y si eso, cenamos unas ostras con Moët Chandon, o unas ostras con Moët Chandon en París, o unas ostras con Moët Chandon en el piso de tu amiga de Madrid que también es mi amiga y va a hacer ver que no tiene ni idea de nada. Que, por cierto, hacer ver que no tiene ni idea de nada, lo borda. Hasta a veces pienso que le sale de dentro.

Estas cosas pasan solo por una razón. ¿Porque no se valora la pasta entre amiguetes? Qué va, todo lo contrario. Se valora y mucho, especialmente la propia y la que cuesta ganar. La ajena y la que cae del cielo ya es otra cosa. La única y auténtica razón es la impunidad. Mejor dicho, la sensación de impunidad que hace que, en ocasiones, si te pillan, no seas impune. Yo mando y los demás obedecen y los que obedecen si se tienen que callar se callan, porque calladitos están más guapos e incluso pueden hacer carrera. Yo mando y acuerdo y trapicheo. Y como yo mando, tengo derecho a tener momios, chollos, canonjías, prebendas. Casi siempre importantes, a veces bastante idiotas.

Mira tú por donde, que el Candelas lleva Capa y a veces no se le distingue. Estaba yo en la sala de espera de la Comisaría de Policía—no voy a decir de donde— porque los asaltacaminos también llevamos carnet y se nos caduca, y en eso que vino un señor muy puesto a decirle al madero de la puerta unas cuantas cositas al oído. El madero de la puerta, vestidito de azul como se lleva ahora, dijo algo así como que no va a haber problema y al poco llegó una pareja y un chaval. No tenían tique ni falta que les hizo. Pasaron por delante de los que sí teníamos, y le sacaran al niño algo así como el pasaporte. Hubiera podido ser el tío del madero de la puerta, el primo del recepcionista, el tabernero de la esquina. Siempre se hace un favor a un amigo. Solo que en esta ocasión no era un amigo. Era, no os lo vais a creer… don David el jefe y señora.

Si, señor, con dos albúminas. Primero, el guardaespaldas para sondear, después la autoritas, que siempre tiene prisa y que se considera impune, obligado a los favores. A que se les hagan, evidentemente no a que ellos los hagan, que la ley debe ser igual para todos y la justicia ídem. Ya lo decía aquel, que la justicia es igual para todos. Y el tique para sacarse el carnet o el pasaporte y hacer cola, también debería serlo. Pero es igual para todos los iguales, para todos los acostumbrados a la impunidad, a la prebenda y al chollazo. Es un caso idiota, ciertamente. Pero los casos idiotas son los más sencillos para el ejemplo. Porque si esto pasa con las tonterías a la vista del público, qué no pasará con las cosas serias en los despachos.

Lo del Consell Esportiu es la espuerta que quedó abierta cuando nadie imaginaba que alguien la vería. No se trataba de nada pegado directamente al poder y hasta por eso es posible que se libren en el futuro. Allí no había función interventora directa, aunque hay cientos de acuerdos en el gobierno local que omiten la función interventora sin que pase nada, porque omitir la función interventora es incomprensiblemente legal. Porque ya se sabe que los interventores son unos plastas y la burocracia un jeroglífico, en ocasiones ideado para paralizar las soluciones y favorecer los conflictos. Pero los interventores tienen como obligación intervenir y eso siempre molesta a quienes deciden por encima de su bien y del mal colectivo.

Lo que quiero decir es que las mayorías absolutas son lo peor que pudo inventar el ciudadano en una democracia. Deberían estar absolutamente prohibidas porque garantizan las decisiones unilaterales, la conducta autoritaria y la sensación de impunidad. Cuando las mayorías absolutas se ejecutan durante décadas, son un cáncer destructivo para las comunidades que las sufren. E incluso, cuando estas se pierden, la inercia es tan abrumadora y sus consecuencias tan sombrías, que los que las han perdido se siguen considerando intocables y los que están a su vera los siguen observando como incuestionables. Esto es lo que está pasando en l’Hospitalet desde el último cuarto del siglo pasado y ya sería hora de decir basta. Los que mandan tienen todo el derecho a seguir mandando porque siguen ganando elecciones, pero esta vez tienen la obligación inevitable de escuchar. No de hacer ver que escuchan, sino de escuchar de verdad. Claro que para empezar a escuchar tienen que desprenderse de esa sensación de impunidad que lo marronea todo. Y el primer paso es pedir el tique en la comisaría para renovar el carnet o lo que sea. Si no, las cosas se complican, algunos alcaldes acaban expulsados por tráfico de influencias y algunos tenientes de alcalde se ven obligados a aceptar que se pasaron de la raya para no verse enchironados, como ha pasado en esta ciudad en los últimos tiempos

Es hora de revitalizar los mercados municipales

Carlos Galve Farré (Activista i peixater)

En nuestra ciudad hay ocho Mercados Municipales. Reiterar su importancia social y económica es, en mi opinión, una realidad evidente. No me cansaré de subrayar lo necesarios que son.

La dura realidad en l’Hospitalet es el estado de salud de nuestros Mercados Municipales. El diagnóstico es preocupante y muy grave. Hay quienes sugieren, con cierta reticencia, que la evolución de las sociedades conlleva cambios inevitables, un precio que debemos pagar por la modernidad. Esa opinión no me convence.

Este mismo discurso también resuena cuando se habla de la Inteligencia Artificial y se afirma que las escuelas y maestros serán poco necesarios. Quizás algunos consideren que este ejemplo es exagerado al compararlo con el caso de los Mercados, pero creo que no es tan descabellado.

Es obvio que en nuestra ciudad coexisten diversas posiciones y sensibilidades sociales y políticas, y el grado de responsabilidad varía según la postura. Los partidos de izquierda han tratado al pequeño comerciante, al “botiguer”, como un elector cautivo de CiU o la derecha. Esto no solo es un error, sino también una nefasta praxis electoral. Asumo mi responsabilidad por no haber luchado adecuadamente contra esta incongruencia y, por ello, hoy quiero abordar este tema sin complejos, reconociendo también mi propia miopía. Mi objetivo es contribuir a mejorar el crítico estado de los Mercados en nuestra ciudad.

Es importante destacar que en l’Hospitalet ha gobernado el mismo partido durante 45 años. No tengo interés en satanizar a nadie políticamente ni en criticar de manera estéril hechos del pasado; lo que me preocupa es el futuro.

En la Barcelona socialista de Maragall, la situación de los mercados en la ciudad vecina se abordó de manera diferente, y sus resultados son manifiestos. La calidad comercial de sus mercados es indiscutible. Sin intentar ser injusto, tanto en las épocas socialistas como en la de CiU, los republicanos de ERC trabajaron y entendieron qué hacer para reformarlos y revitalizarlos.

Los Mercados enfrentan dificultades en todas partes. Los cambios en los hábitos de vida y las nuevas maneras de alimentarnos han dado lugar a nuevas propuestas. No voy a ignorar esta realidad. Sin embargo, hay una gran diferencia entre reconocer las dificultades y actuar como si no hubiera nada que hacer más que dejar que mueran de inanición. Un ejemplo reciente en nuestra ciudad es la aprobación de la apertura de dos grandes superficies a escasos metros de los Mercados Municipales en el barrio de Bellvitge. Esto es una clara muestra de doble moral e irresponsabilidad.

Los supermercados son una competencia inevitable, y debemos aceptarlo, pero eso no excluye la defensa del modelo de mercado como algo esencial para mantener el equilibrio y la calidad social y económica de la ciudad.

Es válido mi empeño en demostrar que vale la pena trabajar para revitalizar nuestros Mercados. Comenzaré recordando a nuestra vecina Cornellà, donde también hay un gobierno socialista, que cuenta hoy con uno de los Mercados Municipales más emblemáticos y referentes de toda Cataluña e incluso de España: el Mercado de Sant Ildefons. Funciona de manera ejemplar.

No me refiero al PSC como tal, sino que considero a los socialistas de l’Hospitalet como responsables de la decadencia que hemos vivido durante sus 45 años de gobierno. La voluntad política es clave; no se puede echar la culpa a los técnicos. Los políticos son quienes eligen las decisiones, y los técnicos actúan de acuerdo a lo que se les ordena. Por lo tanto, no voy a entrar en discusiones con los técnicos, ya que rápidamente se escudarán en las normas y leyes que deben cumplir.

El debate es claro: si las normas y leyes dificultan la reforma de los Mercados y del pequeño comercio, es de sentido común reconocer que el problema es político, no solo técnico. Si las normas están obsoletas y no ayudan a abordar las nuevas necesidades para reactivar los Mercados, vamos por mal camino.

Los Mercados Municipales son indicativos de la salud del municipio y reflejan si están funcionando correctamente o, por el contrario, están en decadencia. El trabajo de los operadores, los llamados paradistas, y las políticas del Ayuntamiento son claves. Por ejemplo, los horarios son una dificultad evidente, pero solo generar frustración entre los paradistas, sabiendo que su estructura les impide trabajar 16 horas, no es positivo. Debemos buscar soluciones constructivas.

Hay tres grupos que definen el Mercado: Ciudadanos/Consumidores, Comerciantes/Paradistas y Administración/Ayuntamiento. Lo más común es que la Administración/Ayuntamiento cargue la responsabilidad del fracaso de la gestión comercial sobre los Comerciantes/trabajadores autónomos. Al mismo tiempo, muchos Comerciantes creen que la Administración es la única responsable de encontrar soluciones al deterioro de los Mercados. No entraré en el grupo de Ciudadanos/Consumidores para no extender demasiado mi reflexión. Las responsabilidades son compartidas; solo el grado de poder las diferencia y, sobre todo, les emplaza a tomar decisiones políticas. Todos sabemos que las Asociaciones de Paradistas son clave para facilitar la interlocución entre los implicados y la Administración. Por ello, es fundamental reforzar las Asociaciones de los Mercados.

Un Mercado configura un espacio económico de intercambio, pero, sobre todo, crea un espacio social y cultural que articula hábitos saludables, promueve la sostenibilidad y fomenta una economía de calidad, alejada de las trampas manipuladoras de las técnicas de merchandising de las grandes empresas. No solo son un ejemplo de arquitectura comunitaria pública, sino también el lugar donde las personas se conocen e interactúan para decidir qué comprar y cómo alimentarse. La competencia para los mercados proviene indudablemente de los grandes lobbies que desarrollan sofisticadas técnicas para manipular el consumo, especialmente en el ámbito alimentario.

No es suficiente trabajar en Promoción Económica solo con buena voluntad. Debemos llegar a una conclusión: necesitamos establecer un foro de debate profundo, apoyado por expertos especializados en comercio y economía social pública.

La magnitud de la situación de nuestros Mercados no permite paños calientes. Creo que es momento de asumir su complejidad, por no decir gravedad, y buscar expertos que nos ayuden a reformular la dinámica de revitalización. Ellos deberían ser capaces de presentar propuestas útiles a los partidos políticos y a la sociedad civil, especialmente a los pequeños comerciantes y a la Administración. Es fundamental debatir y llegar a conclusiones para situar nuestros Mercados en el siglo XXI. No podemos permitir que sigan muriendo.

Alcalde Quirós: además de darte a conocer, que está muy bien, es prioritario que enfoques tu atención en este tema si no quieres pasar a la historia como el enterrador de nuestros Mercados. Aunque creas que los pequeños autónomos no te votan, los ciudadanos te lo agradecerán. Quien avisa no es traidor.

Estar en Babia para que las críticas no nos rocen

Ahora sí que creo que L’Estaca sirve para algo en esta ciudad. Me lo confirmó el grado de ostentación de Triple Q el día del pleno, con el movimiento de las manitas mientras leía un papel uno de los miembros de la Junta de FIC. Estuvo mirando hacia los lados, hacia el centro y hacia adentro, mientras hacía un corazoncito con los deditos para evitar escuchar lo que se decía, que aún antes de sonar sabía que ni le iba a gustar nada, ni le iba a interesar un pimiento. Cuando ya estaba hartito de permitir el discurso, se puso a mirar su pantalla para ver cuándo tenía que interrumpir porque estaba seguro de que la diatriba iba a durar más de 5 minutos. Lo que no sabía es que le iba a ahorrar al hablante un ahogo, porque no se podía leer más deprisa. Se le entendió todo, pero casi hay que llamar a emergencias para ponerle oxígeno al chavalín de FIC que ya tiene una edad, como casi todos nosotros.

Aquel desprecio indisimulado de Triple Q era el principal reflejo de lo incómodos que están siendo estos chicos de FIC e inequívocamente, del grado de influencia que está logrando L’Estaca. Cosa de la que me alegro por esta ciudad. Porque tener un medio donde se escriben cosas que escuecen a unos y a otros —escuecen a bastantes, por los lamentos que se perciben en todas las orillas: algunos de los cuales llegan en formato voz o en formato papel—, y que siempre garantice la sorpresa, es muy importante. Más importante que tener otros medios donde se escriben cosas que no escuecen a casi nadie: un género periodístico bastante más abundante por estos pagos.

Dicho lo cual, no deja de ser sorprendente que el gobierno no tenga bastante con los medios afines, con los medios parafines y con los medios casi enteros, y que tenga que echar mano de un barómetro para dorarle la píldora, como el que ha salido esta semana: difícil de creer, por lo menos. O las 1.500 entrevistas que dicen que se han hecho corresponden a gente que vive en l’Hospitalet pero podría vivir en el Kilimanjaro, o las 1.500 entrevistas forman parte del limbo universal que es ese lugar que no se sabe si existe o es inventado, o sencillamente está formado por personas que responden a preguntas que no les suenan.

Por ejemplo. Dice el barómetro que el 60% de los entrevistados considera que la ciudad ha empeorado en los últimos dos años pero el 66% —dos de cada tres vecinos—, está muy o bastante satisfecho de vivir en su barrio. No es que sean respuestas contradictorias porque uno puede estar muy contento del barrio en el que vive y percibir que la ciudad empeora, pero no me negaran que es un tanto extraño, especialmente cuando el 53% de los entrevistados también coincide en que los barrios van peor y eso ocurre en 4 de los 6 distritos de la ciudad.

Las cosas, según se percibe, van mal, pero los ciudadanos son tan sensibles que le dan un 5,7 de nota media a la gestión municipal, pese a que el 40% de los entrevistados piensan que la gestión ha ido a peor. Si percibieran que todo progresa adecuadamente el 10 les sabría a poco… Otra curiosidad: al 30% de los entrevistados, el cambio de alcalde les parece positivo pero el 80% no tienen ni idea de quién es el alcalde. De donde se deduce que nadie sabe nada, que todo cambio está bien valorado o que simplemente lo que había antes del nuevo alcalde les escocía bastante. Con decir que casi el 90% de la población entrevistada no conoce a un solo concejal está todo dicho y que la concejala más conocida es Lola Ramos, que ni siquiera forma parte de la Junta de Gobierno, ilustra sobre cómo están las cosas y del interés que puede tener un barómetro como instrumento de valoración del estado de la ciudad, donde lo que está claro es que casi nadie sabe nada y que todo se contesta por puro azar.

Según el Ayuntamiento, el barómetro le ha costado a cada hospitalense 0,10 euros. Lástima de dinero empleado para conocer poca cosa o para conocer demasiada, vete a saber. No sabría decir qué es peor, si estar seguros de que se responde al azar o simplemente descubrir que ésta es la auténtica realidad de lo que tenemos. En cualquier caso, mucho dinero para tan poca utilidad que podría dedicarse a cosas más sensatas. Ahora he recordado, por ejemplo, que el CB l’Hospitalet no pudo ascender  este verano de categoría porque no consiguió algo así como 50.000 euros que hubieran permitido poner el nombre de la ciudad en un lugar de prestigio deportivo. Renunciar a dos barómetros: ese era todo el esfuerzo. Claro que ver en los papeles que el equipo de gobierno saca un aprobadillo en la gestión, da mucho morbo. El mismo que descubrir que todo el mundo se siente orgulloso de vivir en una ciudad en la que de 1.500 entrevistados solo han oído hablar del alcalde unos 260.

Pareciera como que la ciudad estuviera en Babia. Y ojalá fuera así, porque Babia es un lugar idóneo para estar en ídem, porque no puede ser más hermoso, sosegado y relajante, el hermoso valle entre Asturias y León. Por cierto, que en uno de sus bellísimos pueblos hay una calle dedicada al magistrado R. Quirós, quien sabe si tío abuelo de otro que suele estar en Babia cada vez que le dejan, para que las críticas apenas le rocen: el insigne Triple Q de las manitas…

L’experiència de la UNESCO a l’Hospitalet: un exemple de convivència, concòrdia i voluntat crítica per enfortir la idea de ciutadania

FRANCESCA GILABERT CORTINA (Vocal de la Junta de Tres Quarts per Cinc Quarts-Associació UNESCO de L’H. Ex-vicepresidenta de la Federació Catalana d’Associacions i Clubs UNESCO (FCACU)

Aquest article sobre Tres Quarts per Cinc Quarts com a Associació UNESCO de l’Hospitaletsurt amb motiu de la petició que ens fa  Foment de la Informació Crítica de l’Hospitalet (FIC-LH)), de fer un article sobre la UNESCO per publicar a L’Estaca. Hem considerat fer-ho explicant  quan sorgeix la nostra vinculació amb el món UNESCO, això què significa, què ens aporta i què aportem.

L’entitat Tres Quarts per Cinc Quarts (any de creació 1993), va esdevenir Associació UNESCO de l’Hospitalet de Llobregat  l’any 2008.  Aquest fet, des del seu inici ens va omplir de satisfacció i alhora de responsabilitat, ja que sempre hem mostrat clarament el nostre compromís amb els objectius  de la UNESCO (Organització de les Nacions Unides per a l’Educació, la Ciència i la Cultura),  ja que ens sentim identificats amb els valors de la UNESCO, i de les diferents tasques que realitza.

Ser Associació UNESCO ha vingut a reforçar els valors que com a entitat Tres Quarts per Cinc Quarts volem potenciar, valors democràtics i de defensa dels drets socials i humans i hem concebut aquests, com una feina absolutament essencial per al manteniment del patrimoni cultural i humà, com a intent de garantir un millor enteniment entre els diferents pobles i les diferents cultures.

Coincidim plenament en el que diu  l’Informe del Secretari General de les Nacions Unides al 2005 (Kofi Annan, Premi Nobel de la Pau 2001), que versa sobre un concepte més ampli de la llibertat: desenvolupament, la seguretat (la pau) i els drets humans. No tindrem desenvolupament sense pau i no tindrem cap de les dues coses si no es respecten els drets humans.

L’Associació UNESCO de l’Hospitalet, és una associació no governamental que forma part de la Federació Catalana d’Associacions i Clubs UNESCO (FCACU), formant part del seu Consell Directiu pràcticament des de la seva incorporació a la FCACU fins al 2022, col·laborant activament en les diferents activitats que la mateixa realitzava, i del 2017 al 2022 assumint la vicepresidència de la FCACU.

Actualment col·laborem com un membre actiu més de la FCACU compartint els ideals de la Federació. Aquesta aplega una vintena de membres actius dels Països Catalans. La seva tasca  és la coordinació de les associacions membres i els programes conjunts, llur representació internacional i les relacions amb les institucions.

Els temes propis de les associacions i clubs UNESCO són els propis de l’Organització de les Nacions Unides:  l’educació, la cultura, la ciència i la comunicació, contribueixen als esforços  a favor de la pau, els drets humans, els drets dels pobles, i la protecció del medi ambient.

El treball intern, és a dir, les reunions de les juntes, les assemblees i les sessions de treball de la Federació i el de cadascun  dels seus membres,  ajuden a consolidar les associacions i la pròpia Federació.

Una activitat que es fa des de finals dels anys 90 és la Trobada de la Tardor, que aplega les associacions i clubs membres de la Federació cada tardor en una població diferent. L’objectiu és facilitar el coneixement de les activitats de les associacions membres, compartir projectes i informar de les propostes de la UNESCO.

L’Assemblea General Ordinària (AGO) de la FCACU, s’acostuma a fer en una població on hi ha una Associació o Club UNESCO, amb la finalitat de facilitar el coneixement mutu entre els membres de les associacions i clubs. Es complementa amb un àpat i un itinerari guiat per conèixer el patrimoni de la ciutat on es fa l’Assemblea.

També és tasca de la FCACU vetllar pel bon ús del nom UNESCO. Promou les relacions entre els membres de la Xarxa Civil UNESCO (Associacions i Clubs UNESCO, Xarxa d’Escoles Associades a la UNESCO, Grup de Biblioteques catalanes Associades a la UNESCO i Càtedres UNESCO catalanes).

Per primera vegada al 2011, la Xarxa Civil UNESCO a Catalunya va organitzar la Setmana UNESCO, entorn el dia 16 de novembre, dia internacional de la tolerància i data de constitució de la UNESCO. Des de llavors ençà, cada any s’organitza la Setmana UNESCO.

L’Organització de les Nacions Unides per a l’Educació, la Ciència i la Cultura (UNESCO), va néixer el 16 de novembre del 1946, és l’organisme dedicat a aconseguir l’establiment de la pau, mitjançant la cooperació internacional en els àmbits de l’educació, la ciència, la cultura i la comunicació i informació.

I ens diu que els acords polítics i econòmics no són suficients per garantir el suport durador i sincers dels pobles. La  pau s’ha de basar en el diàleg i la comprensió mútua. La pau es construeix des de la solidaritat intel·lectual i moral de la humanitat.

Amb aquest esperit, la UNESCO desenvolupa eines educatives par ajudar a les persones a viure com a ciutadans del món, lliures d’odi i intolerància. Treballa per a garantir que tots els nens i ciutadans tinguin accés a una educació de qualitat.

La UNESCO reforça els llaços entre les nacions al promoure el patrimoni cultural i la igual dignitat de les cultures, reforça els llaços entre les nacions. La UNESCO fomenta programes i polítiques científiques com a plataformes per al desenvolupament i la cooperació. Defensa la llibertat d’expressió, com dret fonamental i condició clau per a la democràcia i el desenvolupament. Com laboratori d’idees, la UNESCO ajuda als països a adoptar normes internacionals i gestiona programes que fomenten la lliure circulació d’idees i l’intercanvi de coneixements. La seu de la UNESCO és a París.

Com a entitat de L’Hospitalet valorem molt positivament el camí seguit, amb més de 30 anys compromesos amb la ciutadania de l’Hospitalet des de Tres Quarts per cinc Quarts, i amb 17 anys com a Associació UNESCO. Segueixen vius en tots nosaltres els valors que ens guia: democràcia, convivència, diàleg, respecte, enriquiment mutu…. fent-nos ressò de l’impuls de la societat civil per crear debat i generar opinió des de l’ètica, la participació, el respecte i el pluralisme…

Seguim tenint viva la convicció que un canvi profund sempre és possible. S’ha d’estar amb la ciutadania, treballar amb la societat civil per oferir activitats d’interès que fomentin la participació i el creixement com a ciutadans i ciutadanes. Creiem fermament que una societat crítica i informada és un element essencial per una democràcia de qualitat.

També creiem que els acord adoptats a l’Assemblea General de les Nacions Unides en relació a l’Agenda 2030 i els seus 17 Objectius de Desenvolupament Sostenible (ODS) adoptats, mitjançant la resolució “transformar el món”  són més necessaris que mai  per contribuir per un món més just i igualitari.  La preocupació pel benestar de les persones i la necessitat de disposar d’un entorn de qualitat ha vertebrat l’agenda de les polítiques internacionals des del naixement de les Nacions Unides.

Tanquem aquest article recordant una cita de l’admirat Federico Mayor Zaragoza, exdirector general de la UNESCO, figura excepcional i creador de la Fundació per una Cultura de Pau,  pel seu incansable compromís de treball  en defensa dels seus ideals  a favor de la pau, l’educació i els drets humans: “Hem d’aprofitar l’ocasió no només per tenir  una època de canvis, sinó que ha de ser un canvi d’ època”, sempre pot haver-hi un nou començament. 

Aprenguem dels que defensen amb passió i dedicació un món millor!

De la literalidad a la teleología: la doble vara de medir y a ver si nos entendemos

Un moment d’un ple municipal.

Los chicos y chicas de FIC me han hecho llegar el acuerdo de denegación de palabra en el pleno de diciembre que el alcalde ha protagonizado mediante un decreto del 20 de enero que me ha dejado patitieso. Lo explico. Esa entidad torraculions para el poder —molesta, vaya— viene pidiendo desde hace meses la palabra en el pleno municipal, que luego cede a portavoces de colectivos distintos para que expliquen sus quejas. Lo hace por tres razones, según creo. La primera, porque está de acuerdo con que los vecinos se expliquen en el templo de la palabra a nivel local que es el plenario. La segunda, porque sus estatutos proclaman que la entidad defiende la libertad de los ciudadanos para que se expresen donde sea y la tercera, porque el Reglamento de Participación del Pleno y del resto de plataformas institucionales está expresamente diseñado para restringir el uso de la palabra de manera extensa, libre y plural.

A la entidad ya le llegó hace meses, que ese alcalde humanista de las nuevas maneras, el amigo triple Q, se anduvo quejando por los pasillos de que había vecinos que tomaban la palabra sin tener derecho y que los insensatos de ERC/EUiA que eran simplemente los tramitantes de los permisos, andaban detrás de esos excesos libertarios. Y que había que impedirlo. Los de FIC tienen en sus manos este instrumento sobre el que me leéis (lestaca.com), que lleva tanto tiempo diciendo verdades como puños que no solo están soliviantados los que consideran que nacieron a la política para ostentar el poder omnímodo en esta ciudad, sino los que acompañan a ratos a la camarilla del Jesusillos con el que se hacen fotos. Tendrán que aceptarlo, pero les cuesta y, como les cuesta, van a poner todas las pegas posibles para impedir que FIC se les suba a las barbas.

No deja de ser curioso —y yo no sé de leyes, pero hay cosas que chirrían— que el alcalde decrete el 20 de enero que se le impida la palabra a FIC en el pleno del 20 de diciembre anterior y que los argumentos utilizados para ello formen parte de un Informe del secretario de la Corporación de fecha 17 de enero de este año, no del pasado. Y que todavía no hayan encontrado el momento, pese a que el decreto obliga a ello, de transmitirles oficialmente la denegación de palabra a la entidad solicitante.

Pero eso no es lo peor. Lo peor son las razones alegadas que pone de manifiesto don FAS, el secretario, para darle la razón a su alcalde con el que necesita llevarse muy bien. Dice que FIC es una cosa exclusiva de periodistas y que solo le interesa la información y por eso la entidad tiene casi 60 socios entre los que solo hay un par o tres de profesionales del tema. Y, por cierto, ni un solo profesional de los medios oficiales del gobierno local, que no quieren ni acercarse a sus actos no sea que les condenen en su puesto de trabajo al ostracismo eterno. Todos los que se mueven en la ciudad —y aunque el equipo de gobierno se mueve poco controla el tránsito— saben de sobras que FIC es una entidad crítica que suele poner el dedo donde a todos les perturba y no solo en materia informativa, claro está. Unos, porque se juegan el salario, otros la subvención, otros el trato deferente y buena parte, todo ello a la vez. Los de FIC no necesitan jugarse nada, porque nada tienen, desde sus inicios: ni salarios, ni subvenciones ni tratos deferentes. Y ni los tienen, ni los necesitan y probablemente ni siquiera los desean. Se conforman con que les lean, les escuchen y puedan ayudar a otros a reflexionar, a ser menos autoritarios, más empáticos, mucho más condescendientes y a ser bastante más inteligentes de lo que son.

Pero lo dicho. El secretario dice que FIC es una cosa que no es, y niega que sea exactamente lo que es: una entidad al servicio de la ciudadanía para evitar las restricciones arbitrarias sobre sus derechos. Entre ellos, el de la libertad de expresión en el pleno municipal. Pero dice bastante más, tanto, que el alcalde le tendría que llamar al orden porque entre tanta interpretación subjetiva sobre las finalidades de una entidad, clarifica la literalidad, pero también el trasfondo real del reglamento aprobado. Dice el amigo FAS: “no hay duda de que la normativa de participación del Ayuntamiento por lo que hace a la participación en el Pleno, tiene una finalidad clara de reconocer el derecho a participar en el Pleno solo a un grupo reducido de sujetos”. Y dice verdad. Cuantos menos molesten en el pleno, mucho mejor para el gobierno. Si pudiera prohibir la presencia pública, sin duda la prohibiría. Todo lo que molesta, mejor que deje de existir, eh?, valientes de FIC…

FAS dice otras cosas divertidas, por ejemplo, que en las interpretaciones de las normas una cosa es el criterio interpretativo literal y otra cosa muy distinta el criterio interpretativo teleológico. Lo usa para el reglamento de participación, pero se lo guarda para la interpretación de los Estatutos de FIC. Pues bien, el criterio interpretativo teleológico que sirve para entender que no se quiere que participen los vecinos que van por libre por muchas razones que tengan, debería servir para entender que las finalidades de FIC van más allá del fomento de la información crítica: tienen que ver con la libertad de expresión, la adopción de acuerdos trascendentales escuchando a la ciudadanía y la ejecución de acuerdos de gobierno que mejoren la calidad de vida de los ciudadanos y no que la perjudiquen como llevan tantos años haciendo en l’Hospitalet.

FAS, está feo ser literal para unas cosas y teleológico para otras. Y de paso, explícaselo al que firma el decreto, que seguro que lo ha firmado sin saber de qué hablas…

Els nous pressupostos municipals de l’Hospitalet: un pas endavant per a la ciutat

Un moment del Ple que va aprovar els pressupostos de l’Hospitalet.

ANTONI GARCIA

Els pressupostos municipals són una eina fonamental per gestionar els recursos públics. Decidir com es distribueixen aquests recursos, establir prioritats i planificar les inversions és una responsabilitat clau dels governs locals, amb un impacte directe en la vida dels ciutadans.

En aquest context, el nou alcalde de l’Hospitalet, David Quirós, ha assolit un objectiu important per al desenvolupament de la ciutat: aprovar els pressupostos municipals més elevats de la seva història, amb un total de 352 milions d’euros, congelant la taxa de l’IBI i deixant enrere l’acord d’augment del 3% d’aquest impost municipal que la seva predecessora havia pactat amb Esquerra l’anterior exercici.

Aquest èxit, aconseguit gràcies al pacte amb els Comuns, representa un avanç significatiu en la gestió de Quirós i reflecteix el compromís d’iniciar una nova etapa a l’Hospitalet, garantint que es destinin més recursos a projectes que beneficiïn la comunitat, millorin els serveis públics i impulsin noves inversions en àrees clau com l’habitatge, la neteja i la millora i dignificació dels barris.

Una de les mesures més destacades d’aquests pressupostos és la incorporació d’una reivindicació històrica de diverses organitzacions socials i polítiques que, en l’actual context de crisi de l’habitatge, adquireix encara més rellevància com és  l’increment de la partida destinada a la compra d’habitatges per al parc públic, amb un pressupost inicial de 16 milions d’euros, dels quals gairebé 7 milions es destinaran a l’adquisició d’habitatges de lloguer social.

Aquesta mesura està vinculada a una altra iniciativa que serà un dels pilars centrals de la transformació de la ciutat: la rehabilitació d’habitatges en el marc del nou pla integral de reforma i millora dels barris del Samontà, a la zona nord del municipi. L’objectiu és començar a fer front a la rehabilitació d’un parc envellit d’edificis residencials construïts durant les dècades dels 60 i 70, molts dels quals requereixen una reforma urgent. Es calcula que a la ciutat hi ha 50.000 habitatges amb mancances d’accessibilitat, dels quals prop de 4.000 necessiten una reforma immediata.

Si a aquesta ambiciosa proposta li sumem altres partides pressupostàries, com l’augment de la despesa en serveis socials —essencial per implementar un nou model llargament reivindicat per les entitats, amb l’objectiu de respondre adequadament a l’emergència social—, l’increment del pressupost destinat a la neteja —que facilitarà la modernització de la flota de vehicles i maquinària per millorar la neteja dels barris—, i altres inversions en espais públics, com la reforma del Parc de l’Alhambra, la millora de les instal·lacions esportives, de l’accés al riu Llobregat, la renovació de l’enllumenat públic, o la reforma dels mercats municipals, començant pel Mercat del Collblanc, així com el pla d’ombres i confort climàtic als equipaments educatius o la preservació i divulgació del patrimoni històric, entre altres actuacions  podem concloure que aquests són uns bons pressupostos per als ciutadans de l’Hospitalet.

Quirós ha superat el primer desafiament amb l’aprovació dels pressupostos municipals, posant les bases del seu projecte de ciutat. L’èxit de la seva gestió dependrà de la capacitat d’executar les accions previstes. Crear marcs de col·laboració amb les altres Administracions i construir acords, així com sinergies amb les diferents entitats, el teixit associatiu i altres organitzacions polítiques de progrés, més enllà de les legítimes diferències ideològiques, serà també una tasca clau per a l’alcalde per impulsar un projecte de ciutat àmpliament compartit que fomenti una nova transformació centrada en les persones i que doni resposta als reptes socials, econòmics i ambientals del segle XXI, amb l’objectiu de millorar la qualitat de vida dels ciutadans, la millora dels barris, carrers i places, i el sentiment de pertinença a la nostra ciutat.

Moviments sense fi en el cartipàs municipal

Consell del Districte II

Ja fa un temps que, gairebé de forma setmanal, es produeixen canvis i modificacions en el cartipàs municipal. El canvi a l’alcaldia sembla estar en la base d’aquesta situació. No hi ha explicacions públiques al veïnat dels perquès i els motius d’aquests canvis. Però segurament es poden entreveure algunes claus.

En primer lloc tot sembla anar en el sentit d’augmentar la centralització del govern municipal. La substitució de l’històric Belver al capdamunt de l’administració municipal no sembla haver estat fàcil, però malgrat això, es troben a faltar explicacions i definicions de quins són els objectius de les constants remodelacions del cartipàs.

Més enllà d’aquestes percepcions, hi ha canvis que poden ser reveladors de les intencions de la nova cúpula municipal. Es tracta de dos remodelacions en l’assignació de responsables polítics dels districtes. A hores d’ara un mateix regidor, com és el cas de Rafael Gómez, assumeix els districtes I (Centre) i VI (Bellvitge i Gornal). Un altre regidor, David Torres, apareix com responsable dels districtes IV (Les Planes i La Florida) i V (Pubilla Casas i Can Serra i, finalment la regidora Olga Gómez suma el districte III (Santa Eulàlia i Granvia Sud) al districte II (La Torrassa i Collblanc) que ja dirigia en la legislatura anterior.

Aquest últim canvi, la substitució en el districte III de la regidora Iman Aisa per Olga Gómez, que s’ha produït aquest mes de gener, no s’ha explicat de cap manera al veïnat, més enllà d’una nota informativa de la regidora Iman als membres del Consell del Districte.

Notes en una sessió participativa per la reforma del reglament de participació

Tots aquests canvis s’estan fent al mateix temps que està en marxa un determinat procés participatiu a la ciutat per definir un nou reglament de participació. En la majoria de sessions d’aquests procés participatiu, s’ha fet evident la demanda de dotar de més capacitats als Consells de Districte, obrint-los a la participació més clara i fàcil del veïnat. Però la definició del cartipàs municipal que s’està desenvolupant sembla anar en tota una altra direcció. Els districtes apareixen marginats per part del govern municipal.

Amb les dobles assignacions de responsables polítics al davant de les regidories de districte, el caràcter institucional dels districtes es devalua i només es consideren com instàncies merament administratives en mans dels corresponents coordinadors de districte, sotmesos a una verticalitat de les decisions que, en la pràctica, rebaixen la utilitat i el paper dels Consells de Districte.

En la pràctica s’està reforçant la idea que el govern municipal ha d’inspirar.se en les formes organitzatives de les empreses i es considera que la ciutat i l’Ajuntament constitueixen una mena de propietat del govern municipal. Des del govern s’administra la ciutat al marge del veïnat, amb una millor o pitjor voluntat, però afrontant la feina amb una certa mentalitat empresarial. No per casualitat, en Paco Candel, que va ser regidor a l’Hospitalet en els primers anys de democràcia, va escriure un llibre recollint part de les seves experiències dins del Consistori que té per títol “Un Ajuntament anomenat Ells”.

I aquest “Ells” és la forma com des del govern municipal es veu al veïnat de la ciutat i és també el mateix “Ells” com bona part del veïnat veu l’Ajuntament. Així és com es veu a sí mateix el govern municipal, com un ens extern al veïnat que administra la ciutat gairebé en nom propi. En aquest context, els processos participatius i els organismes de participació tenen una rellevància força escassa.

Quan s’afronta un procés de elaboració d’un nou reglament de participació a l’Hospitalet, en lloc d’eixamplar la participació es limiten encara més les possibilitats de fer sentir veus del veïnat en els plens municipals, com es desprèn d’un informe dels secretari municipal.

La democracia municipal per ser efectiva demanda acostar al màxim possible els llocs de decisió política a la participació del veïnat; la participació necessita, per ser efectiva, la proximitat. L’actual configuració dels districtes, sumat a l’actual reglament, fan molt difícil la participació efectiva del veïnat, una participació quer va més enllà de la simple informació vertical. Seria millor i més democràtic que la base de participació fossin més els barris, que no deixen de ser uns espais vius, que no pas uns districtes dissenyats massa vegades sobre un plànol des d’un despatx.

La concentració de responsabilitats polítiques en organismes cada vegada més allunyades de la ciutadania està sent una dinàmica molt practicada des del poder. Es fa valer una suposada eficàcia i una simplificació administrativa, per justificar aquest allunyament. No fa tant de temps quan els governs de Jordi Pujol i Roca Junyent defensaven suprimir molts ajuntaments en nom d’aquesta eficàcia. Un govern progressista hauria d’anar en una direcció oposada, en el nostre cas, dotant de capacitats de decisió a Consells de Barri en tot el que té a veure amb el seu entorn.

Dos mil vint-i-cinc. A l’Hospitalet, s’escriu amb lletres

CARLES FERRER (activista cultural)

0.- Commemorar

Hi ha dates que són oportunitats. N’hi ha que ens conviden a mirar enrere per recordar el passat i n’hi ha que ens animen a mirar endavant i proposar-nos reptes per encarar el futur. De totes, el duet format pel dia de cap d’any i el primer dia de gener és la data oportunitat més universal.

Enguany, la xifra ‘2025’ del nou any hi afegeix solemnitat i commemoració. D’una banda és una xifra matemàticament perfecta, un any quadrat (452=2025), i de l’altra, és una xifra rodona, una bona data per reivindicar que, a l’Hospitalet, ‘2025’ es pot escriure amb lletres perquè hi ha molt a celebrar.

Commemorar és fer memòria. 

  1. La vila transformada

El gener de 2001, tot just iniciat el segle XXI, s’hi van fer a la ciutat les jornades El segle XX a debat. L’Hospitalet, 75 anys de ciutat, organitzades pel Centre d’Estudis de l’Hospitalet i l’Arxiu Municipal. Es va aprofitar la commemoració dels setanta cinc anys de la concessió del títol de ciutat a l’Hospitalet per, en paraules dels organitzadors, “revisar el conjunt del segle XX d’un l’Hospitalet que ha traspassat la frontera del segle XXI sense assemblar-se gens al de cent anys abans”.

Les ponències van girar al voltant de tres àmbits: les transformacions econòmiques i urbanístiques, els canvis en l’estructura política i social i, finalment, la interculturalitat i els processos de creació d’identitats. Van participar sociòlegs, antropòlegs, historiadors, geògrafs, economistes, urbanistes, i gairebé 300 persones inscrites.

Les jornades El segle XX a debat. L’Hospitalet, 75 anys de ciutat[1] va ser un èxit, gràcies a la participació, a la qualitat de les ponències i a les reflexions generades als debats. El que portem de segle XXI ens mostra que l’evolució del món i, de retruc, de la nostra ciutat, segueix en un estat accelerat de transformació continua. Els avenços tecnològics, els moviments demogràfics i els canvis de l’economia multipliquen els reptes que la política ha de resoldre, i de moment no se’n surt. Les aportacions del pensament i la reflexió són més necessàries que mai.

Tant de bo el gener de 2026 es pogués debatre i aprendre sobre les transformacions de l’Hospitalet dels primers 25 anys de segle XXI amb el rigor, la participació i la transversalitat amb què aquelles jornades van analitzar el segle XX a la nostra ciutat. 

Fer memòria és aprendre.

  • La ciutat transformadora

Les Festes de Primavera 2025 celebraran els 100 anys del títol de ciutat de L’Hospitalet, ha anunciat la tinenta d’alcaldia de Ciutat Transformadora en declaracions al programa Taquilla Inversa de L’H Digital[2].

És un lligam curiós perquè, en realitat, el títol de ciutat de 1925 no va transformar en res la vida de la ciutat, ni va millorar en res la vida dels seus habitants, tot el contrari del que va suposar la creació de les Festes de Primavera, una decisió que sí va ser transformadora.

Les Festes de Primavera van néixer l’any 1980 amb una clara vocació de fer ciutat, van ser creades amb la voluntat de transformar el calendari festiu de la ciutat (en el què només hi havia les festes majors dels barris) al servei de l’autoestima col·lectiva i la creació d’identitat com a ciutat. Es va triar organitzar-les al voltant de la diada de Sant Jordi, la festa del llibre, l’exemple més clar de participació ciutadana, tradició popular i celebració de la cultura.

La cultura transforma. Arrelar-se és un encert, sempre.

  • Els llibres són la clau

El segle XVIII, James Lackington, conegut com el ‘llibreter sabater’ pel seu anterior ofici, va regentar la llibreria The Temple of the Muses de Londres i va transformar el món de les llibreries amb diverses innovacions que afavorien l’accés a la lectura de la possible clientela. Aquesta era la seva premissa:

Els llibres són la clau del coneixement, de la raó i de la felicitat, i qualsevol persona ha de tenir dret d’accedir-hi a preus assequibles, sense importar el seu nivell econòmic, la seva classe social o el seu sexe”.

L’any 1994, el primer manifest de la UNESCO sobre la biblioteca pública incideix en la idea de servei públic i accès universal al coneixement, la raó i la felicitat:

Per assolir el seus objectius, la biblioteca pública ha de ser d’accés fàcil, i les portes han d’estar obertes a tots els membres de la comunitat, sense distinció de raça, de color, de nacionalitat, d’edat, de sexe, de religió, de llengua, de situació social ni de nivell d’instrucció”.

A l’Hospitalet, al llarg dels anys, diverses iniciatives i projectes, públics i privats, han posat la paraula, els llibres i la lectura al centre. L’objectiu: col·laborar al coneixement, la raó i la felicitat de tothom.  

El contrari de la paraula no és el silenci, sinó la violència[3].

  • L’Hospitalet, múltiples aniversaris de lletres

Dos mil vint-i-cinc és una oportunitat.

És un bon any per recordar aniversaris de lletres amb números rodons -25, 50, 75, 100, 150, 40, 20, 5- que, quan pensem en commemoracions, són especials. Aquests números però, en realitat són una excusa per explicar històries de lletres, de gent nascuda -viscuda o treballada- a l’Hospitalet, entusiasta de la paraula i coneixedora de la seva força. 

25 anys de la Biblioteca Central Tecla Sala. Sens dubte és l’aniversari més rellevant. La inauguració de la biblioteca Tecla Sala, el 17 de desembre de l’any 2000, fou un fet cabdal per dos motius: d’una banda, recuperà un valuós patrimoni històric de la ciutat, i de l’altra banda, certificà l’èxit del Pla Municipal de Biblioteques aprovat l’any 1997, un pla elaborat per la cap de biblioteques, Nelly Peydró, per dotar l’Hospitalet d’una ambiciosa xarxa de biblioteques que pogués donar servei de proximitat a tots els districtes de la ciutat. L’Hospitalet fou el primer municipi de Catalunya a tenir un pla de biblioteques aprovat al ple municipal.  

50 anys de la Llibreria La Florida. L’aniversari més valent i compromès. El dia de Sant Jordi de 1975 va obrir portes la llibreria La Florida, la primera llibreria de llibres i amb vocació de dinamització cultural que es va obrir a la ciutat als anys 70. Era el final del franquisme, i en aquell moment els llibres i la cultura eren especialment importants per l’educació i el coneixement de la població, i els feixistes ho sabien. Entre 1971 i 1976 va haver unes 200 llibreries atacades per grups d’extrema dreta amb total impunitat. En aquest context van néixer tres llibreries[4] a l’Hospitalet: La Florida, la llibreria Catalunya a Santa Eulàlia i Els Pins al Centre. 

75 anys de la Biblioteca de La Caixa. L’any 1950 es va inaugurar la biblioteca de La Caixa al carrer Baró de Maldà. Fou la primera biblioteca oberta des de l’any 1932, en plena República, quan Francesc Macià inaugurà el primer centre de lectura pública a l’Hospitalet, i que va ser tancat poc després d’acabada la guerra civil.

100 anys del naixement de Francesc Candel. La celebració més entranyable és la del centenari de Paco Candel, nascut al Rincón de Ademúz valencià el 31 de maig de 1925. Candel va ser el narrador de la nostra perifèria, dels marges on la ciutat va canviar el seu nom. D’altra banda, també va ser el primer regidor de cultura de l’Hospitalet de la nova etapa democràtica. Del seu pas per la política municipal hospitalenca va néixer la novel·la Un ayuntamiento llamado Ellos.

150 anys de la primera biblioteca frustrada. La commemoració més trista. La proclamació de la primera República espanyola l’any 1873 va facilitar, entre altres coses, la concessió de noves i nombroses biblioteques públiques. El diputat Josep Rubau Donadeu, escollit pel Districte de Sant Feliu (al qual pertanyia l’Hospitalet), va aconseguir per la nostra ciutat una d’aquestes biblioteques, i així es va anunciar l’any 1874. Malauradament, la biblioteca no es va arribar a fer, s’hagués obert l’any següent si no s’hagués produït el cop d’estat de Pavía contra la república.

40 anys de la Sala Mossèn Homar. Una commemoració justa i necessària. El mes de març de 1985 es va inaugurar la Sala Mossèn Homar a la Biblioteca Can Sumarro. Josep Homar i Duran fou, a banda de mossèn i rector de la parròquia de Santa Eulàlia de Mèrida, un apassionat dels llibres, col·leccionista, bibliòfil i un lector en veu alta excepcional. El seu fons bibliogràfic fou un dels més importants de Catalunya i, des de 1963, la planta baixa de l’ajuntament va acollir una biblioteca amb el nom i el fons de Mossèn Homar. La inauguració de la Sala Mossèn Homar dins la biblioteca de Can Sumarro feia justícia a la figura singular de Josep Homar, el bibliòfil que va exercir de mossèn però també d’hospitalenc els darrers 19 anys de la seva vida. Recordar-lo és just i necessari.

20 anys de laLa biblioteca, el cor de l’escola’. Celebrar aquest aniversari és encara més just i més necessari. La feina de mestres i educadors per fer descobrir el plaer de la lectura és fonamental i en Jaume Centelles és un dels mestres que més s’hi ha dedicat, i amb èxit. L’any 2005 va publicar el llibre La biblioteca, el cor de l’escola, guanyador del Premi Rosa Sensat de Pedagogia. El llibre recull l’experiència de la biblioteca de l’escola Sant Josep el Pi de l’Hospitalet i deixa constància que és possible convertir la biblioteca escolar en un espai acollidor i central que faci bategar tota l’escola. Vint anys després, moltes biblioteques escolars han desaparegut o malviuen per falta de recursos de l’administració educativa, reivindicar la seva importància és del tot necessari. 

5 anys de l’Espai Llavors. El més inesperat i agosarat. El mes de desembre de l’any 2020, l’any de la pandèmia, es va inaugurar l’Espai Llavors al barri de Collblanc, una llibreria cooperativa especialitzada en editorials independents i llibre crític que, al mateix temps, es reivindica com a llibreria de barri. Tenen una especial cura en la tria de llibres que fomenten la justícia social, la diversitat, el respecte pel medi ambient, el feminisme i els valors comunitaris.

La lectura és una de les pràctiques de la resistència”.[5]

  • Fer memòria. Història del llibre a l’Hospitalet

El llistat de les històries de llibres i ciutat que aquest 2025 celebren aniversaris rodons ens deixa sobre la taula un repte inajornable i evident: escriure la “Història del llibre a l’Hospitalet”. Una història que expliqui la ciutat fent memòria de la història de les biblioteques de l’Hospitalet, de les llibreries, de les editorials, dels bibliòfils, de la festa del llibre,…

Hi ha dates que són oportunitats i no es poden deixar perdre. Commemorar és fer memòria i fer memòria és aprendre, també sobre nosaltres.


[1] Les ponències i els debats, així com el contingut dels seminaris previs, han quedat recollits a Quaderns d’estudi 17. El segle XX a debat. Jornades l’Hospitalet. 75 anys de ciutat. Centre d’Estudis de l’Hospitalet, 2001. Consultable a: https://raco.cat/index.php/QuadernsCELH/issue/view/15545

[2] https://lhdigital.cat/noticies/les-festes-de-primavera-2025-celebraran-els-100-anys-del-titol-de-ciutat-de-lhospitalet/

[3] Josep Maria Esquirol a “La resistència íntima”

[4] Més informació a De quan els llibres eren la clau. Llibreries de l’Hospitalet als anys 70. Consultable a: https://raco.cat/index.php/QuadernsCELH/article/view/332548

[5] Josep Maria Esquirol a “L’escola de l’ànima”